48.000 euros para reparar 7 celdas de los cartujos

I.L.H.
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La Junta adjudica a la empresa AIBUR la restauración de las cubiertas de estas dependencias en el ala norte del monasterio. Las obras, que también afectan al muro, se prevén finalicen antes de fin de año

Aunque no estén abiertas al público, las dependencias de La Cartuja de Miraflores abarcan mucho más que la iglesia, san Bruno o las esculturas de Gil de Siloé en el sepulcro de Juan II e Isabel de Portugal y el retablo mayor. Lo que fue el palacio de recreo de Enrique IIIse reconvirtió en monasterio a mediados del siglo XV para albergar una iglesia, dos claustros y las instalaciones monásticas donde los cartujos pueden hacer vida de ermitaños. Estas últimas, que también forman parte del conjunto arquitectónico, son las que ahora son objeto de restauración.

En concreto se va a intervenir en siete celdas del ala norte, las que están situadas detrás de la capilla mayor de la iglesia. En estos espacios los cartujos oran, estudian, trabajan, comen y duermen en solitario, como ermitaños, que es como pasan la mayor parte del tiempo. Su ermita cuenta con un pequeño jardín en la planta baja, donde también tienen la zona de trabajo y el zaguán. En la planta superior disponen de un estudio, el dormitorio, un oratorio y el servicio.

La restauración afecta únicamente a las cubiertas de estas celdas y al muro perimetral de la zona. Las obras acaban de ser adjudicadas por la Junta a la empresa burgalesa AIBUR, que se encargará de ejecutarlas por un importe de 48.390 euros, IVAincluido.

Respecto al cerramiento del muro de mampostería, la intervención requiere actuar sobre 23 metros lineales. Según el proyecto, se procederá a la demolición de la zona desplomada y se realizará una nueva cimentación mediante zapata de hormigón armado. Después se reconstruirá manteniendo la misma tipología constructiva, utilizando la piedra de la pared derribada y rematándolo con teja árabe.

En cuanto a las celdas, la superficie de cubierta a reponer se cifra en 218 metros cuadrados (tres celdas de la galería lateral y cuatro de la galería en forma de ‘L’). Lo que se hará, básicamente, es levantar el revestimiento de la teja para colocar un elemento impermeabilizante inferior de onduline. Luego se recolocará la teja que se haya podido recuperar o se pondrá una nueva donde no haya sido posible-aquí se trata también de teja árabe-. En cuanto a los aleros y remates perimetrales con los muros verticales, se realizará con un material similar al existente de zin.

El arquitecto técnico que dirigirá la ejecución es Pedro Luis Fuente García. El plazo estimado para la obra es de 3 meses, por lo que la empresa estima concluir los trabajos antes de que finalice el año.