El mayor pulmón verde de la capital ribereña, el Monte de la Calabaza, cuenta desde ayer con una nueva zona reforestada con especies autóctonas, como encinas, sabinas y majuelos, que se sumarán a esta gran masa arbórea. Por segundo año consecutivo, Calidad Pascual ha aprovechado la celebración del Día Internacional del Árbol para realizar una actividad que se enmarca dentro de su Plan de Responsabilidad Corporativa. El objetivo final es contrarrestar la huella de carbono que provoca su actividad fabril en el Medio Ambiente. «Dentro de este marco es donde encajamos el Bosque Pascual, que empezamos el año pasado y esta es la segunda edición, y que nuestra intención es plantar al menos mil árboles aquí. El objetivo es compensar las emisiones que la compañía tiene en su día a día y no somos capaces de eliminar por su propia actividad», explicaba Francisco Hevia, director de Responsabilidad Corporativa y Comunicación de Calidad Pascual.
En esta cita con la naturaleza, los organizadores contaron con una nutrida presencia de voluntarios, entre los que destacaba el consejero de Fomento y Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, Juan Carlos Suárez-Quiñones, que puso el acento en la necesidad de sumar esfuerzos para lograr «el reciente compromiso europeo para reducir las emisiones de CO2 es una responsabilidad de todos: desde el ciudadano hasta los gobiernos», destacando el poder de convocatoria de Calidad Pascual en esta actividad.
Suárez-Quiñones, que estuvo acompañado por la alcaldesa de Aranda, Raquel González, resaltaba que nuestra región cuenta con 4.500 montes de 1.411 municipios, lo que la convierte en uno de los mayores gestores de Europa en materia forestal, con una certificación de gestión forestal sostenible por órganos independientes de 683.000 hectáreas. El territorio castellano y leonés cuenta con un 51% de superficie forestal, un porcentaje superior a países como el Reino Unido y Portugal, situándose como el undécimo territorio europeo con más masa arbórea, con un total de 4,8 millones de hectáreas. Además de los beneficios para el Medio Ambiente, los bosques castellano leoneses son fuente de riqueza, con un total de 670 millones de volumen de negocio y un total de 16.000 empleos en este ámbito. Por eso, la Consejería de Fomento pretende «llegar a los 900 millones de actividad económica y unos 20.000 empleos, a través de poner en el mercado más madera de forma sostenible en el sector», como apuntaba Suárez-Quiñones.
En la plantación realizada ayer, y en la que colaboraron activamente tanto el consejero como la alcaldesa arandina, a pesar de la lluvia, participaron más de medio centenar de chavales de las categorías inferiores de la Arandina CF, con su presidente, Pedro García, y del CD Aranda Riber, además de parte de la plantilla del primer equipo del Villa de Aranda de balonmano, junto a su nuevo presidente, Álvaro Perote. Todos cogieron una azada para realizar la plantación y se mancharon las manos de barro para dejar bien asentados los plantones de especies autóctonas.