La Gerencia de Salud en Burgos informó ayer en el Boletín Oficial de Castilla y León (Bocyl) de la adjudicación de los servicios de rehabilitación ambulatoria y logopedia por un importe de 158.965,80 euros y 144.931,10 euros, respectivamente. En total, 303.896 euros, de los cuales más del 51% se le pagarán al Hospital Recoletas porque es adjudicatario en los dos procedimientos de contratación. Además, Sacyl también contará con San Juan de Dios para las rehabilitaciones ambulatorias y con las especialistas María Jesús Alonso, Pilar Vicario y Paz Buesa para los tratamientos de recuperación del lenguaje, habla, voz y audición.

El pasado 29 de diciembre se publicó el anuncio de licitación de los tratamientos de rehabilitación ambulatoria por un canon de explotación máximo de 172.017 euros y un plazo de adjudicación que finalizará el próximo 30 de junio. Los detalles de la contratación definitiva se hicieron públicos en el Bocyl de ayer, que especifica que Recoletas se hará cargo de dos de los tres lotes por un total de 103.965,80 euros (51.581,70 el primero y 51.623,10 el segundo). El Hospital de San Juan de Dios es el adjudicatario del tercer paquete, que asumirá por 55.761 euros. En ambos casos ya se ha formalizado el contrato.

El HUBU tiene servicio de rehabilitación ambulatoria, pero la externalización con centros privados es un mecanismo recurrente desde hace años para evitar que tanto las listas de espera como los tiempos medios de demora se incrementen más allá de lo que ahora se considera razonable. Y a este concierto hay que añadir otros como el suscrito hace unas semanas para garantizar la rehabilitación domiciliaria a personas que, por su condición física, necesitan asistencia en casa. En este caso, Sacyl informaba el pasado martes, 19 de abril, de que pagará 23.954 euros al Instituto de Rehabilitación La Bañeza para que preste atención domiciliaria hasta finales de junio.

En cuanto a los tratamientos enfocados al lenguaje, al habla, la voz y la audición también es habitual que la Gerencia de Salud lo contrate con clínicas o profesionales del sector privado, pero porque en el público no se ofrece. Así, y al igual que en anteriores ocasiones, Sacyl pagará al Hospital Recoletas 54.470,70 euros; y a las especialistas María Jesús Alonso (48.147,40 euros), Pilar Vicario (25.263 euros) y a Paz Buesa (17.050 euros). En total, la sanidad pública pagará 144.931,10 euros hasta el próximo 30 de junio por este servicio, que todavía no ha incorporado a su oferta en la provincia.