b.g.r. / burgos
El pasado 11 de enero, el periódico The New York Times incluyó a Burgos en la lista de los 46 destinos mundiales a visitar en 2013. Situó a la ciudad en el puesto 25, muy por delante del otro destino nacional que aparece en este ránking, Guetaria. Tres mes después, el número de turistas estadounidenses se ha incrementado un 145%, según los datos aportados por el centro de recepción de visitantes (Citur) de Nuño Rasura.
En los cuatro primeros meses de 2013 han pasado por estas instalaciones un total de 449 ciudadanos estadounidenses, frente a los 180 del mismo periodo pero del ejercicio anterior. El crecimiento ha sido exponencial, puesto que se ha pasado de los 18 contabilizados en enero, cifra incluso inferior a la del mismo mes de 2012 (24), a los 31 de febrero, los 106 de marzo y los 294 de abril. Por ello, el presidente del Instituto Municipal de Cultura y Turismo, Fernando Gómez, no duda en atribuir esta «subida espectacular» al efecto de la aparición en el prestigioso periódico norteamericano.
A pesar de todo, hay que tener en cuenta que hasta ahora el peso de este tipo de turismo no resulta relevante, puesto que se parte de «cifras bajas». Sin embargo, el edil reconoce que los datos hasta abril marcan una tendencia. «La publicidad hace efecto y tendrá un mayor reflejo a medio plazo», subraya en referencia no solo a la repercusión publicitaria del rotativo, sino también a la nueva estrategia municipal de turismo.
Con los datos de Citur en la mano, los estadounidenses han pasado a ocupar la tercera posición en lo que a turistas internacionales se refiere, desbancando a los italianos. Por delante siguen estando los franceses y los alemanes, aunque su evolución ha sido más moderada. Así, han recalado en la ciudad 1.016 visitantes galos, lo que supone un aumento del 10%, y 580 germanos, cuyo número ha caído un 10% respecto al primer cuatrimestre de 2012.
crecimiento generalizado. También cabe resaltar el incremento de los visitantes procedentes de Reino Unido, un 58% al pasar de 283 a 447 hasta abril, al igual que de los australianos, de 50 a 161, si bien la cifra de estos últimos es menos representativa. En líneas generales, el número de turistas internacionales ha crecido un 30%, de 3.896 en 2012 a 5.081 en 2013, y el de nacionales un 18%, de 11.168 a 13.191.
El concejal de Turismo considera que estos datos invitan al optimismo al enmarcarlos en la situación económica actual y en el descenso generalizado del turismo en toda España. «Refrendan que las políticas municipales están teniendo su efecto», comenta el edil, al tiempo que alude a la nueva campaña promocional de la ciudad que se presentará en junio en Madrid y que también incluye publicidad a nivel nacional e internacional, si bien en este caso el mercado estadounidense no será el primer objetivo, que lo ocuparán otros países de Europa.
Aunque las cifras de Citur revelan un importante crecimiento del número de visitantes de Estados Unidos, la Asociación de Guías Oficiales no ha notado la subida en la misma medida. En este sentido, Luis Antolínez, profesional con 30 años de experiencia, retrocede hasta el ataque a las Torres Gemelas para hablar de punto de inflexión. «Antes, había muchos colegios estadounidenses que elegían visitar Burgos, después hubo un bajón horrible y ahora se está regulando», manifiesta.
Antolínez conoce muy bien el perfil de los turistas norteamericanos, principalmente grupos de estudiantes y peregrinos que pasan, como mucho, un día y medio en la ciudad. Vienen a España con circuitos culturales que incluyen otros puntos de la geografía nacional como Madrid, Bilbao y Pamplona, y en muchos casos procedentes de Segovia. Visitan la Catedral, dan un paseo por el centro histórico y en alguna ocasión incluyen la Cartuja en su ruta.
Se quedan maravillados con la Catedral y la riqueza patrimonial, además de con la historia local hasta el punto, según Antolínez, de preguntarse «qué es lo que no hubo en Burgos». Su nivel cultural es «elevado», sobre todo el de los peregrinos, mientras que el conocimiento previo de la ciudad es cercano para los de origen hispano y desconocido para los que no. La gastronomía también les atrae. Van de tapas, pero las principales comidas las hacen en los alojamientos. El mapa geográfico del turismo exterior que realiza este profesional lo encabezan los franceses, seguidos de japoneses, alemanes, estadounidenses, italianos, holandeses y polacos.