Reencuentro con la tradición navideña

B. Antón / Salas
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Los vecinos han realizado un Belén monumental en el que han incluido las huellas de Costalomo y el castillo de Castrovido

Los más pequeños apreciaron todos los detalles que se han incluido en este monumental Belén. - Foto: Azúa

Los vecinos de Salas de los Infantes se han reencontrado este invierno con su Belén al recuperar una tradición perdida hace más de quince años, la de crear un gran Nacimiento en los bajos del Ayuntamiento. Y lo han hecho a lo grande, como han podido comprobar las numerosas personas que han pasado a visitar el Belén desde que se inauguró este Belén, en el que llama la atención el protagonismo del agua, con varias cascadas  y dos ríos que desembocan en un lago, además de las diferentes secuencias de luz.  

Creado sobre un paisaje típico serrano con casas de piedras y las inconfundibles chimeneas cónicas, no le falta ni un detalle y hace varios guiños a la ciudad milenaria y su entorno, como una plaza con un tilo lleno de luces de colores y el Castillo de Castrovido, que durante unos días será de Herodes. Pero si hay algo identificativo de esta localidad y que no podía faltar en su Belén son las huellas de dinosaurios del yacimiento de  Costalomo, elaboradas por el artista Chechu Contreras y situadas junto a unas tenadas y los pastores, como las reales.

Tradicionalmente los jóvenes de la localidad elaboraban este Belén cada Navidad, pero sin motivo aparente se dejó de hacer. Este año, Pelayo Barbero, uno de aquellos jóvenes, sugirió a primeros de noviembre a varios vecinos y a profesionales de distintas ramas como la fontanería, la carpintería o la electricidad retomar la tradición. Buscaron los elementos que estaban guardados de aquella época, y cómo se encontraban muy deteriorados se pusieron manos a la obra para reconstruir algunos, aunque la mayoría de ellos han sido comprados, en parte gracias a la donación económica de la mayoría de los comercios de Salas. Los vecinos también han colaborado aportando sus piezas particulares.

El párroco de Salas fue el encargado de inaugurar el nacimiento de unos 30 metros cuadrados, un acto en el que  los niños que asisten a la catequesis cantaron unos villancicos y tras el cual se sirvió chocolate y rosquillas para todos. Este Belén artesanal estará abierto al público para su visita hasta el próximo día 6 de enero en horario de 7 a 9 de la noche, salvo el día de Nochevieja. Además, el domingo se celebró el tradicional Belén Viviente en la Plaza de Santa María.