Nació en Valencia pero se siente un burebano cuando regresa a Llano, el pueblo en el que nació su padre y al que vuelve todos los años para disfrutar de sus fiestas patronales y de los amigos.
Cuando era pequeño, el conocido actor solía pasar sus veranos en Llano de Bureba, lugar de nacimiento de su padre. En la actualidad, intenta regresar al pueblo durante las fiestas patronales y durante su tiempo libre se dedica a jugar al pasabolos, a la tuta y a merendar en las bodegas un buen cordero acompañado de una botella de chacolí. Además visita otros pueblos de la comarca como Castil de Lences, donde admite tener grandes amigos.
Enrique Arce nació en Valencia hace 41 años, aunque se encuentra muy unido a la comarca burebana debido a que su padre, Vicente Arce, es natural de Llano de Bureba. La formación profesional de Arce es muy completa. A los 22 años, se marchó a Estados Unidos para estudiar interpretación en la American Academy of Dramatic Arts, de Nueva York, y además ha hecho numerosos cursos para completar su formación entre los que destacan los realizados en el Teatro Joven del Reino Unido, en HB Studio´s o en los estudios de Juan Carlos Corazza. Sin embargo, el famoso actor declara que su vocación por la interpretación es bastante tardía. «Estudiaba Derecho y Empresariales en Valencia y jamás pensé en ser actor. Fue todo muy rápido. Probé en una compañía joven, me enganchó y en seguida me lancé. No tuve miedo de dejarlo todo e irme a Nueva York a estudiar porque cuando tienes unos padres como los míos el miedo se desvanece. Seguramente sin su apoyo incondicional jamás me habría lanzado a esta aventura», desvela Enrique Arce.
Entre los trabajos más importantes del actor destacan sobre todo los realizados para televisión, aunque también ha participado en numerosas películas y obras de teatro. Así, en la pequeña pantalla, ha trabajado en diversas series como Periodistas, Compañeros, Física o Química, Sin tetas no hay paraíso o Amar en tiempos revueltos y además ha aparecido de manera esporádica en otras series como en Al salir de clase, Policías, en el corazón de la calle, Cuéntame cómo pasó o R.I.S. Científica.
Arce, declara que para él, Llano es un sitio «muy especial» a la vez que afirma que siempre que puede, intenta volver a la localidad burebana. «He ido desde pequeño, pero desde que comencé mi carrera de actor, me gusta ir en fiestas cada año, ya que me permite reencontrarme con quién soy de verdad, fuera de escenarios y de platós. Allí jamás nadie me trata como Enrique Arce, el actor. Allí soy el hijo de Vicente o el sobrino de Teodoro y Juani y eso en mi profesión no tiene precio, porque a veces es fácil perder la perspectiva de quién eres en realidad», comenta el actor. Arce también confiesa que en Llano es «donde más profundamente siento el concepto de familia y en cierto modo me siento un poco de allí. A veces pienso que soy un burebano que nació en Valencia».
Por otra parte, el conocido actor cuenta que guarda muy buenos recuerdos de sus estancias en Llano, aunque destaca uno por encima de todos. «En cuanto al recuerdo, tengo especial cariño a uno: el verano que mi padre fue el pregonero de las fiestas patronales del pueblo. Mi padre, Vicente Arce Arce es burgalés hasta la médula y no le suele gustar mucho ser el centro de atención. Verlo en el balcón del ayuntamiento hablando a todos sus paisanos hizo que se me saltaran literalmente las lágrimas. Yo estaba muy nervioso y emocionado, porque sabía lo importante que eso era para él y el reto que le suponía. Nunca lo olvidaré», manifiesta Arce.
Como casi siempre regresa a Llano durante las fiestas patronales, las actividades de Arce en el pueblo suelen estar relacionadas con el ocio. Así, el actor afirma que dedica gran parte de su tiempo libre a las actividades propias de los días de fiesta como jugar al pasabolo, bailar con la orquesta o ir a las bodegas para cenar cordero y tomar chacolí y recuerda que quedó campeón de la Tuta el primer año que participó, aunque admite que luego «no he vuelto a tirar un bolo en los diez años siguientes», comenta el actor entre risas.
Otra de las ‘aficiones’ del actor cuando está en Llano es «ir a las casas de mis parientes a comer o tomar un café y charlar toda la tarde sobre las mismas anécdotas cada año. Algo que me encanta y que me hace sentir como si el tiempo allí no pasara» comenta.
Pero cuando Arce vuelve a Llano, no se limita a quedarse en el pueblo, sino que también le gusta visitar el resto de la comarca. «Tengo un buen amigo llamado Ignacio Conde que vive en Llano y se conoce la Bureba como la palma de la mano. Un día nos dio un tour a mi hermana y a mí digno de los príncipes de España. Conocí todos los pueblos de la contornada. También voy mucho con mi primo Pepe Valdivielso a Lences, porque tenemos allí a un amigo, ‘el Alicates’, que es el tío con el que más te ríes del mundo y que nos llevó a Castil de Lences, un lugar que me dejó con la boca abierta. Creo sinceramente que es uno de los pueblos más bonitos que he visto en toda mi vida» afirma.
En cuanto a su carrera como actor, Arce señala que para él, los papeles más importantes de su carrera han sido «Fidel, un biopic sobre la vida de Castro, porque fue mi primer (y hasta la fecha único) trabajo para Hollywood, y 9 meses, una película que no ha tenido mucho éxito, pero a la que tengo mucho cariño porque la escribí y protagonicé y la estuve moviendo durante años. En televisión quizás sería la serie Periodistas, porque fue la que me abrió el camino y me dio a conocer para el gran público en España», reconoce.
Además, Enrique desvela que uno de los papeles que más le ha costado interpretar ha sido el de Emilio Alcazar, en la serie Amar en tiempos revueltos. «Era un tipo absolutamente repugnante que me fue muy difícil interpretar porque lo llegué a odiar profundamente, al igual que toda España», afirma.
El próximo año, comenta, estrenará la película A long way down, una producción inglesa que ha estado rodando durante este año y en la que comparte camerino junto a Pierce Brosnan y Toni Collete entre muchos otros muchos actores. Mientras, espera el momento de regresa a Llano.