A ese maravilloso islote del arte que es la Galería Río 10 de Quintanilla Vivar han recalado, como náufragos de la luz, dos artistas imponentes. Lo han hecho con un equipaje deslumbrante que se combina, fusiona y complementa a la perfección, revelándose como el gran hallazgo, el verdadero tesoro de esa isla prodigiosa. Escenario natural es el título de la exposición que hoy se inaugura en Galería de Arte Río 10. Las pinturas de Rubén Arroyo y las esculturas de Teresa Akkerman-De la Cal conforman un cosmos único y luminoso.Su exposición conjunta parece obra de magia: cada pared, cada rincón, es pura prestidigitación, una verdadera aventura para los sentidos que tiene en la naturaleza su truco genial.
Arroyo ha desembarcado con una colección de paisajes sublime, en la que el azul y el blanco se erigen con fuerza y suavidad en los colores predominantes. Todas las obras son impactantes, da igual su tamaño. Paisajes reconocibles de la comarca del Arlanza o de la propia ciudad de Burgos salen renovados de su paleta, dulces, aparentemente ingenuos. Arroyo reinventa un paisaje castellano casi marítimo, en el que apenas hay ocres y donde los azules y los blancos emanan una luz distinta, realmente encantadora, de una belleza radical. Rubén Arroyo se revela brillante en esta exposición, para la que ha trabajado sin ataduras y a conciencia, con la plenitud de hacer exactamente lo que quería.
Del laboratorio artístico de Akkerman podría decirse que se encuentra en las profundidades del océano. La fabulosa colección de esculturas de temática marítima que exhibe en esta muestra es una oda a ese mundo desconocido, abisal. Un juego de formas y colores que remite a los orígenes, cuando todo era agua y más agua. Piezas excepcionales, libérrimas, en las que la artista ha volcado toda su intuición porque, dice, «no todo está bajo nuestro control». Ahí está la inspiración, que ha llevado a la ceramista y escultora a crear un mundo único, en el que la luz desempeña un papel esencial, otorgando a la tres dimensiones de cada pieza una evolución continua, como si fuesen seres vivos, palpitantes.
Enamorada del mar, que para Akkerman encierra los más increíbles ejemplos de imaginación, superiores a los que pudiera crear el ser humano, la artista subyuga con una serie de piezas de barro refractario que parecen salidas de las profundidades del mar o como si fuesen fósiles antediluvianos que contaran, como las caracolas, una historia hermosa y antigua como el mundo.
*‘Escenario natural’, de Rubén Arroyo y Akkerman-De la Cal, se inaugura hoy Galería de Arte Río 10, enQuintanilla Vivar, a las ocho de la tarde. La exposición podrá verse hasta el 17 de mayo. Horario: de martes s sábado, de 18,00 a 21,00 horas.