Casi 500 propietarios deben pactar y pagar la limpieza del monte quemado

I.E. - P.C.P. / Burgos
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La Delegación de la Junta se ofrece a mediar para buscar una empresa que se quede con la madera para biomasa a cambio de dinero o de realizar la concentración parcelaria

Imagen aérea difundida por elMinisterio de Medio Ambiente durante el incendio en el valle delArlanza, que afectó a 705 hectáreas de monte y fincas de cultivo. - Foto: DB

Sofocado el incendio delValle delArlanza que dañó 705 hectáreas, llega la hora de mirar a un futuro en el que los cerca de 500 propietarios de las parcelas afectadas tendrán que ponerse de acuerdo para limpiar el monte quemado y buscar cómo financiarlo, ya que ni los terrenos están asegurados ni existe una línea de ayudas a la que en principio puedan acogerse.

Por contra, la Ley de Montes les obliga a retirar la madera del monte cuando existe el riesgo de plagas, como puede ocurrir este invierno si un hongo coloniza los árboles muertos. Si no se ponen de acuerdo lo hará la Junta subsidiariamente y les pasará la factura. Así se lo explicó el delegado en Burgos,Baudilio Fernández-Mardomingo, a los alcaldes de Mecerreyes,Puentedura y Quintanilla delAgua, con los que se reunió ayer por la mañana antes de visitar, en la que todavía trabajaban 1 agente medioambiental, una cuadrilla de tierra y una autobomba.

Las llamas no afectaron a ningún monte de utilidad pública ni espacio natural protegido y, salvo las 80 hectáreas de pino repoblado del municipio de Mecerreyes, todo lo demás está en manos privadas. Así se lo recordó el delegado de la Junta a los alcaldes cuando estos le reprocharon la suciedad del monte, uno de los motivos por los que el fuego voló.

Además, defendió el operativo y su coordinación, ante algunas críticas. El alcalde de Mecerreyes,Julián Vicario, reconoció no obstante que «en frío la actuación fue correcta» y que «no se podía hacer mucho contra la magnitud de las llamas ni la velocidad» salvo tratar de salvar la granja y las casas de la zona alta de Puentedura, lo que se logró. Asimismo, apuntó que pedirá ayudas para repoblar el monte municipal perdido.

Mientras, el alcalde de Quintanilla del Agua, Leopoldo López, expresó su preocupación por la cantidad de propietarios que se reparten la superficie que calcinó el fuego, lo cual «puede dificultar el proceso para llevar a cabo las labores de limpieza». En este sentido se mostró partidario de arbitrar alguna fórmula semejante a la de la concentración parcelaria o que la Junta se acoja a la Ley de Montes para obligar a los dueños a mantenerlo. Sobre la regeneración de la zona afectada, se mostró optimista, pues confió en que dentro de 1 año «ya se hayan producido algunos brotes», lo que hará «presumiblemente innecesario acometer una repoblación con nuevas plantaciones».