Parece que se pusieron de acuerdo. Casi a  la misma hora, los expresidentes Rodríguez Zapatero y José María Aznar celebraron sendos actos en dos ciudades separadas únicamente por unos 120 kilómetros. Ambos volvieron su mirada hacia Castilla y León, comunidad desde la que salieron para emprender proyectos de mayor envergadura y ambos consiguieron llegar a la Moncloa.

El socialista Rodríguez Zapatero regresó a León para la presentación de un libro histórico, ‘Una alternativa al desembarco’, escrito por varios autores y financiado por el Ministerio de la Presidencia en 2011, cuando aún él presidía el Gobierno. Zapatero tuvo una mención especial para la Ley de Memoria Histórica y reconoció que «volver la mirada hacia atrás es un acto digno de reconocimiento», además de incidir en que «conocer el pasado de un pueblo es un derecho, reconocer lo que sufrió mucha gente es un acto de justicia y reparar las injusticias es un deber» que permite elaborar «el patrimonio ético de los españoles».

Zapatero fue recibido en medio de una gran ovación por parte de las personas que abarrotaban uno de los salones del Hostal de San Marcos de León, saludó a algunos de los presentes y uno de los encuentros más emotivos fue para el Premio Cervantes Antonio Gamoneda, al que se dirigió como «maestro», según informa Ical.

Por su parte, el expresidente del Gobierno José María Aznar también miró hacia atrás y reivindicó la política y el proyecto puesto en marcha en sus años de titular de la Junta de Castilla y León (1987-1989) como el «embrión» esencial en la unión del centro derecha, en una alternativa a los socialistas y en la consolidación democrática, pero también como algo que marcó su trayectoria y su vida política posterior.

«No hubiera podido practicar esa política, ni escribir este libro y no puedo explicarme a mí mismo ni lo que he hecho después ni mi vida política sin lo que nació en Castilla y León», confesó el expresidente durante el acto de presentación de la segunda parte de sus memorias ‘El compromiso del poder’, que se desarrolló en un diálogo con el diputado por Valladolid Miguel Ángel Cortés, portavoz en las Cortes con Aznar.