La Concejalía de Nuevas Tecnologías pretende tener terminado en abril el pliego de condiciones para sacar a concurso la contratación de las cámaras de videovigilancia que controlarán las tres zonas de ocio de la ciudad, Las Llanas, Bernardas, y Bernardillas (Plaza de Roma). Para ello lleva semanas analizando las tecnologías que mejor se pueden adaptar a la necesidad de captar imágenes por las noches -con poca visibilidad- y con buena calidad, para su posterior uso ‘judicial’.
Así, el Ayuntamiento de la capital ha probado cuatro tipos de dispositivos: las cámaras analógicas, y tres sistemas digitales de naturaleza diferente -calidad PAL, HDTV y megapixels-. Los representantes de una empresa que fabrica estas últimas cámaras acudieron ayer a Burgos para mostrar a los responsables municipales su funcionamiento, entre ellos el edil Eduardo Villanueva.
El dispositivo a prueba fue instalado en Bernardas, en el balcón de la Escuela Municipal de Música, con el fin de captar toda la plaza. Este sistema es utilizado en algunas cárceles de España, no solo por controlar casi todos los ángulos de un escenario sino por ser muy resistentes. Están protegidas por material antivandálico que hace imposible su destrucción con piedras o cualquier otro elemento.
Aunque en el Ayuntamiento no han decidido por cuál se decantarán, la tecnología de ‘megapixels’ plantea varias ventajas, empezando por la calidad de la imagen. Como recordaba Villanueva, un requisito fundamental es que con las imágenes «se pueda identificar perfectamente a cualquier agresor tras una petición judicial». Además, el modelo colocado ayer en la plaza de Bernardas capta una panorámica de 180 grados que posibilita controlar no solo la zona de copas sino también la calle, sus aceras y la zona peatonal de Regino Sáenz de la Maza. Asimismo, ofrece la opción de activar el zoom sobre las grabaciones, con el fin de acercar las imágenes más sensibles y con ello identificar a los autores de un eventual delito.
El pliego estará en abril, pero Villanueva no se atreve a adelantar cuándo estarán instaladas las cámaras, ya que la apertura del concurso para su posterior adjudicación debe contar con el visto bueno de Intervención. El alcalde, Javier Lacalle, ha comprometido 500.000 euros para adquirir toda la tecnología, «dinero de sobra para comenzar con la videovigilancia», según Villanueva.
El edil del PP insiste en la necesidad de ampliar el horario de funcionamiento de las cámaras a las 24 horas del día. La Comisión de Garantías de Videovigilancia aprobó que estuvieran activadas de jueves a domingo, festivos y sus vísperas, en horario de 22 a 10. «Pero los últimos sucesos en Bernardas y Bernardillas demuestran que muchos hechos suceden antes o más tarde», indica. Por ello, en noviembre del próximo año, cuando haya que pedir la renovación del permiso, el Ayuntamiento demandará que se alargue la vigilancia a todo el día.
Finalmente se instalarán 16 cámaras en la ciudad. La zona de ocio de Burgos que más tendrá sería la de Las Llanas, con un total de nueve dispositivos. Hay que recordar que aquí se han producido las agresiones o peleas que peores consecuencias han tenido en los últimos tres años. Allí ocurrieron los hechos que en octubre de 2008 terminaron con la vida del joven soriano de 19 años Iván Herrero, que intentó mediar en una reyerta. Jonatan Gómez, de 25 años, era camarero de la Espadería y murió en Las Llanas después de que un grupo de jóvenes -cuatro de ellos fueron detenidos- le dieran una paliza.
En las Bernardas están previstas cuatro. En noviembre de 2009. Aitor del Álamo tenía 20 años y murió por una hemorragia cerebral provocada por los golpes que le propinaron tras mediar en una discusión. En las Bernardillas, la zona de ocio de Gamonal situada en la plaza de Roma, se instalarán otras tres.
El Consistorio no ha decidido aún si habrá un agente de Policía visionando las imágenes en directo o si éstas serán grabadas y se almacenarán en el Centro de Procesamiento de Datos (CPD).