El Ayuntamiento de la localidad de Cabañes de Esgueva, situada en el valle del río del que toma su apellido, se ha propuesto acabar con el déficit de espacios cubiertos para el uso y disfrute de sus 210 habitantes y va a rehabilitar un antiguo lagar municipal para dotar al pueblo de un centro social.
La corporación municipal anterior ya tenía proyectada una actuación que contemplaba levantar un edificio de nueva planta en el que alojar también la Casa Consistorial, pero los nuevos tiempos marcados por la acuciante crisis económica y la falta de recursos por parte de las administraciones locales ha llevado a los actuales ediles a variar los planes garantizando así la recuperación de un importante elemento de la arquitectura tradicional.
«La idea que tenían era hacer un nuevo Ayuntamiento y demás, pero en vista de que la Casa Consistorial que tenemos ahora dentro de lo que cabe está bien y que nos estamos cargando de locales que luego no les vamos a utilizar para otra cosa, optamos por modificarlo», explica el actual alcalde, David González. Un cambio al que también apunta que ha contribuido a que Caja de Burgos «que en su momento también estaba interesada para poner abajo su oficina» haya terminado por desmarcarse.
La corporación municipal aprobó en el último pleno el proyecto redactado para la ejecución de la obra, con un presupuesto de 200.000 euros, y dio luz verde también a la separata correspondiente a la primera fase cuyo importe asciende a 54.000 euros.
La obra está incluida en el Fondo de Cooperación Local 2011 con lo que la Diputación Provincial y la Junta aportarán 21.000 euros cada uno, cubriendo las arcas municipales los 12.000 euros restantes.
«Dada la situación hemos decidido gastar lo mínimo para mantener el edificio y que no se nos venga abajo . Y luego una vez teniendo el proyecto si tenemos algo de dinerillo la idea es ir haciendo cosillas dentro, como el tema de la electricidad, a cuestación personal con los vecinos», explica el primer edil.
El inmueble sobre el que se va a actuar en un imponente lagar antiguo con fachadas de mampostería. Una construcción aislada de un importante valor patrimonial situado en el centro del pueblo, en la confluencia de la calle Real y la plaza de San Sebastián.
En esta primera fase se va a fortalecer principalmente la cimentación y rehacer el tejado. La intención, según informa David González, es mantener las pilas del lagar, el pilón, el husillo y la viga en la planta baja y en la parte superior habilitar un salón multiusos diáfano de unos 30 x 12 metros que se empleará en función de las necesidades que vayan surgiendo.
«La idea es que las señoras puedan ir allí a hacer las manualidades, instalar un telecentro de internet... tener un local corrido, al margen del Ayuntamiento, para en cualquier momento hacer cualquier actividad que necesite hacerse cerrada, porque esté lloviendo o tal», indica el regidor, señalando que se buscan unas dependencias acogedoras ya que aunque disponen de un polideportivo cubierto «es muy grande para hacer historias como una obra de teatro en la que puedas reunir 100 personas».