Carlos Barbero dio un paso de gigante en su carrera dentro del ciclismo profesional. El corredor burgalés ganó el Circuito de Getxo, una prestigiosa prueba celebrada en tierras vizcaínas y que contó con la presencia de equipos del potencial del Movistar, Cofidis o Caja Rural. Además, este triunfo tuvo su mensaje emotivo. Su equipo, el Euskadi, corría por última vez en casa ya que desaparecerá tras la Vuelta a Burgos y qué mejor despedida que una victoria. Barbero devolvió al Fundación Euskadi todo lo que ha recibido desde que abandonó el campo amateur. Este triunfo y los excelentes resultados cosechados esta temporada, deben abrir la puerta a Barbero en algún equipo de forma inmediata. Méritos ha hecho para ello.
El Circuito de Getxo, de 170 kilómetros en un circuito de 17, se endureció desde el principio, con una escapada de cuatro corredores y el férreo control del Movistar. Fue este equipo y el Caja Rural los que intentaron dominar la prueba en los últimos kilómetros, con corredores como Castroviejo, Herrada, Txurruka y Lluis Mas. Sin embargo el Euskadi, con la motivación extra de sus corredores, tiró con el único objetivo de llevar bien colocado a Carlos Barbero. El burgalés no defraudó y en el último repecho fue el más fuerte, imponiéndose por delante del italiano Luca Chirico y de Peio Bilbao (Caja Rural). Lo más sorprendente es que las sensaciones del corredor no fueron buenas hasta el final. Incluso sufrió un pinchazo a falta de 10 kilómetros que le obligó a pegarse un buen calentón para volver al grupo.
Barbero lleva un año extraordinario. Todo comenzó con la victoria final en la Vuelta al Alentejo en Portugal y siguió con el podio en la Vuelta a La Rioja y un extraordinario tercer puesto en el Campeonato de España. Pero el burgalés quería levantar los brazos en una prueba importante y por fin lo logró. «Quería una etapa y esta era especial. Es una pena que un proyecto como el del Euskadi desaparezca y queríamos despedirnos de la mejor forma posible. He hecho méritos suficientes para poder seguir en el ciclismo», concluyó.