Después de que su nombre haya saltado a la primera línea de la actualidad municipal de la capital ribereña al considerársele la opción más lógica para dotar al equipo de gobierno arandino de la mayoría que reclama el Partido de Castilla y León (PCAL) para operar sin sobresaltos, Alfonso Sanz, portavoz y único representante de Ciudadanos de Centro Democrático (CCD) en el Ayuntamiento de la capital ribereña ha roto su silencio para dejar patente su disposición a entablar conversaciones que pudieran desembocar en algún tipo de pacto de gobierno o estabilidad que garantice una cierta tranquilidad en la gestión municipal.
Sin embargo, el corporativo centrista advirtió de que no será él el que dé el primer paso, sino que tendrá que ser el Partido Popular y el PCAL, socios en la actualidad en el Consistorio arandino, los que se pongan en contacto con él y le presenten un proyecto de mandato sobre el que debatir e intentar llegar a acuerdos.
Incluso, Sanz conminó al presidente comarcal del PP, Ángel Guerra, a que igual que hizo con otras formaciones políticas municipales, refiriéndose a los castellanistas y a Unión Progreso y Democracia (UPyD), le invite a dialogar a nivel de partidos a la nueva sede popular donde pueda acudir con una delegación de su actual formación política.
No obstante, advirtió que, a su juicio, se trata de una negociación a nivel local, por lo que abogó por no implicar en las conversaciones esferas provinciales o regionales de los partidos como venía reclamando el PCAL para poder salvar los enfrentamientos e irreconciliables condicionantes personales que puedan existir entre Guerra y Sanz y que desembocaron en la expulsión de este último del PP en el pasado mandato cuando representaba a la formación de la gaviota en el Consistorio arandino.
Sin descubrir sus cartas
Alfonso Sanz no quiso aventurar cuáles serían las reivindicaciones que realizaría para plantear su entrada en un hipotético pacto de gobierno, al considerar que todas estas cuestiones deben de debatirse sobre un proyecto de legislatura que tienen que presentar los que tienen responsabilidades de gobierno y sobre el cuál se pronunciaría.
De la misma manera, el edil tampoco se pronunció sobre si exigirá un puesto en la Junta de Gobierno de Local, siguiendo la senda marcada por los dos concejales comuneros, ni si estaría dispuesto a asumir alguna concejalía, contribuyendo así a descargar la pesada cartera que se reparten en la actualidad los ocho ediles del Partido Popular.