Los alcaldes del Canal de Castilla propondrán un nuevo puente

H. Jiménez / Burgos
-

Auspiciada por la Diputación, una reunión entre regidores de Burgos y Palencia planteará un paso más ancho para la maquinaria agrícola que sigue tirando los pretiles

Varios coches fúnebres pasan sobre el puente de Zarzosa, el día después del trágico accidente de agosto. - Foto: Alberto Rodrigo

Los alcaldes palentinos y burgaleses de las riberas del Canal de Castilla siguen buscando soluciones a un grave problema de seguridad vial que se evidenció el agosto pasado cuando un trágico accidente acabó con la vida de 6 personas bajo las aguas.

Aquellas víctimas, todas con raíces familiares en la localidad burgalesa de Zarzosa de Riopisuerga, despertaron en la opinión pública el recuerdo de unos puntos negros que a lo largo de los años precedentes ya se habían cobrado más muertes y a los que, sin embargo, nadie había hecho caso.

Los puentes sobre el Canal, construidos en el siglo XIX, se habían deteriorado notablemente con el paso de los años. Estaban pensados para la circulación de carruajes pero no de los vehículos modernos, y mucho menos de la maquinaria agrícola de gran tamaño que ahora trabaja en las tierras aledañas. El resultado es que remolques, tractores y cosechadores han ido golpeando los pretiles con el paso del tiempo y habían dejado los pasos sin protección.

La desgracia quiso que fuera en el que mejor conservado estaba donde fallecieron las 6 personas. El de Naveros de Pisuerga (Palencia) contaba con biondas y muretes a ambos lados, pero el coche en el que viajaban los 6 ocupantes perdió el control y acabó empotrado en el vaso.

Tras el siniestro las autoridades de la Dirección General de Tráfico y de la Diputación de Palencia, titular de la vía, se apresuraron a decir que el tramo estaba bien señalado. Pero aun así lo mejoraron en las semanas siguientes, evidenciando que podía estar mejor, y la Confederación Hidrográfica del Duero reparó los pretiles de otros puentes cercanos. Fue el caso del de Zarzosa, pero en cuestión de unos pocos meses las piedras habían caído de nuevo al canal porque las máquinas tienen que seguir pasando.

Medio año después de la terrible madrugada de agosto, los alcaldes parecen estar cerca de sentarse a buscar otra solución porque las ofrecidas hasta el momento no bastan. La Diputación Provincial de Burgos, a través de su diputada Montserrat Aparicio, que además es alcaldesa de Melgar de Fernamental y por tanto conocedora del problema pues el canal discurre junto a la localidad, está liderando la iniciativa.

Según explica la regidora, la semana pasada mantuvo una reunión con la Confederación Hidrográfica del Duero en la que se plantearon varias alternativas. El organismo de cuenca, aunque no es responsable de las carreteras, debe autorizar cualquier tipo de actuación en el Canal que a su vez es Bien de Interés Cultural (BIC).

De aquel encuentro, continúa Aparicio, sacaron la conclusión de que será preciso organizar «una nueva reunión entre los alcaldes palentinos y los burgaleses» para estudiar un paso alternativo o el ensanchamiento de alguno de los puentes existentes. Esto último parece más difícil por la protección de la que goza el BIC, así que  lo más probable sería construir un puente nuevo, adecuado a las necesidades actuales de circulación, más ancho y preparado para soportar el paso de maquinaria pesada.

Así lo confirma el alcalde de Naveros, Carlos Rey, quien apunta que por las conversaciones mantenidas con sus homónimos del entorno más directamente afectado uno de los posibles puntos de construcción de ese puente, si se decide, podría estar entre las localidades de Olmos y Castrillo.

Al tratarse de ayuntamientos muy pequeños, e incluso de pedanías, los regidores han advertido en numerosas ocasiones que se ven incapaces de acometer los arreglos necesarios en sus puentes por falta de recursos económicos. A este respecto Montserrat Aparicio apunta que «habrá que contar con recursos de todos», abriendo la puerta a colaboraciones de las dos diputaciones implicadas.

Castrillo se adelanta

En concreto, el puente de Zarzosa es en realidad una vía de titularidad municipal del término de Ventosa de Pisuerga, pedanía de Herrera de Pisuerga (Palencia). También en el caso de Castrillo de Riopisuerga (Burgos) el puente es una vía local, mientras que el paso de Naveros pertenece a una carretera de la Diputación de Palencia. Esta mezcla de responsabilidades complica cualquier proceso de toma de decisiones, y para ello se prevé en las próximas semanas la reunión de alcaldes de ambas provincias.

Antes, en cuestión de días, el alcalde de Castrillo de Riopisuerga emprenderá la colocación de biondas en su puente. Carmelo Dehesa, el regidor, explica que lo ejecutarán con fondos propios y que cuentan con unos 66.000 euros de presupuesto. Se arriesga a que la maquinaria lo rompa e incluso a que la CHD le obligue a retirarlas, pero está decidido a llevar a cabo la colocación de estas protecciones «porque llevamos tiempo esperando unos permisos y nunca llegan».