Los pinos dañados por el incendio más grave del pasado verano en Burgos -el del 21 de agosto en Fresno de Rodilla- ya tienen un destino. La empresa maderera cántabra José Saiz ganó la subasta convocada por la Diputación para el aprovechamiento de los árboles y pagará en torno a 40.000 euros por todos ellos, 14 euros el metro cúbico. La compañía tiene previsto fabricar palés, ya que el material está muy deteriorado como consecuencia del fuego.
Una cuadrilla de trabajadores de la empresa santanderina lleva trabajando varias semanas en el pinar afectado y ya ha talado casi la mitad de los árboles que fueron pasto de las llamas, según señala el alcalde del pueblo, Fernando Núñez. Por cierto, los vecinos agradecen la rapidez con que se llevan a cabo los trabajos, pero piden que los ejemplares en mejores condiciones «se conserven».
Se trata de una madera «muy depreciada», según reconoce el regidor municipal, «ya que se encuentra muy dañada». Además, había que iniciar la retirada de los árboles «con celeridad», ya que con «la llegada del calor se hubiera estropeado aún más». Además de los daños del fuego, estos ejemplares de más de 60 años sufren una plaga de procesionaria, que podrían haber soportado si no hubieran sido pasto de las llamas. Así que era necesario afrontar esta tarea cuanto antes.
Sobre la repoblación del pinar, Núñez indica que no hay una fecha concreta. El municipio de Fresno de Rodilla y la Diputación Provincial comparten la titularidad de esta masa forestal y entre ambas administraciones habrán de decidir cómo y cuándo se lleva a cabo la plantación de nuevos ejemplares.
Aquel incendio ocurrido el 21 de agosto de 2012 calcinó 584 hectáreas de terreno y arrasó un bosque de pinos en Fresno de Rodilla y alrededores. Las investigaciones llevadas a cabo sobre su origen determinaron que se produjo como consecuencia de una sobrecarga en la línea eléctrica que cruza las tierras de cereal donde se iniciaron las llamas. Ese mismo día por la tarde, Quintanapalla se quedó sin luz. Iberdrola admitió que la hora a la que se produjo el corte de suministro fueron las 14,28. Y la llamada al Servicio de Emergencias 112 de Castilla y León alertando de que se había iniciado un fuego en un terreno agrícola junto a la N-I tuvo lugar a las 14,33. Todo coincide.
Las sobrecargas de tensión eléctrica pueden tener el efecto de un rayo y pueden generar chispas que, si caen sobre una superficie de pasto seco, pueden dar lugar a incendios, tal como ocurrió en Fresno de Rodilla. De ahí la importancia de mantener limpio de maleza el terreno que discurre justo por debajo de los cables que conducen la luz.
Quedó descartada como causa la negligencia de algún agricultor. El fuego, recorrió más de 8 kilómetros en dirección norte. En Fresno prendió en un montón de pacas de paja. Tras venirse abajo, las pavesas alcanzaron un bosque de pinos, que quedó arrasado, y las llamas se extendieron hasta el límite con Santa María del Invierno.