Poco más de un año después de que comenzara a ser obligatorio presentar el certificado de eficiencia energética de las viviendas recién construidas y de las que se pretenden vender o alquilar, la Junta de Castilla y León ha dado un paso más allá al iniciar las inspecciones que servirán para comprobar si se han realizado de forma adecuada. La Administración regional ha encargado esta tarea a las empresas Eurocontrol e Incosa y será esta última la que realizará los controles en la provincia de Burgos. La Consejería de Fomento y Medio Ambiente estima que de aquí a finales de 2015, fecha en la que culmina el contrato, se habrán visitado más de 300 inmuebles.

Para evitar preocupaciones a los propietarios de los edificios, en la Consejería de Fomento y Medio Ambiente recuerdan que estos controles están dirigidos hacia quienes se encargan de realizar las inspecciones ya que poco culpa o ninguna tendrán quienes no sepan si el trabajo que se ha realizado de forma adecuada. Eso, salvo que sean ellos los que hayan propiciado algún incumplimiento. Las sanciones, que se tipifican en leves, graves o muy graves, acarrean unas multas que pueden oscilar entre los 300 y los 6.000 euros. Entre estas últimas se encuentra, por citar un ejemplo, falsear los datos de un certificado y, de menos dureza, exhibir una etiqueta distinta a la que se ha registrado en la Junta de Castilla y León.

El trabajo se ha divido en tres fases. En la primera, que se acaba de iniciar y que se prolongará hasta el 15 de noviembre, se revisarán unos 30 inmuebles en la provincia. La segunda se desarrollará entre esta fecha y el mes de abril y la última concluirá antes de que finalice 2015.

Para la elección de los edificios que se van a revisar se utilizará un criterio proporcional a las certificaciones presentadas. De este modo se pretende que además de edificios de viviendas pasen por este control naves industriales, oficinas e inclusos inmuebles públicos de las administraciones. También se tendrá en cuenta la valoración energética ya que poco sentido tendría visitar un espacio que tiene ya la nota más negativa.

A fecha 7 de octubre se habían presentado ante la Junta de Castilla y León 4.919 certificaciones energéticas de inmuebles de la provincia de Burgos. Si no se entregara ninguna más, cosa improbable, el porcentaje de edificios que serán supervisados sería de aproximadamente el 6%. Eurocontrol e Incosa cobrarán por realizar el trabajo en toda la región 275.000 euros.

El grueso de las certificaciones energéticas presentadas en la provincia de Burgos se corresponde con edificios de viviendas en bloque (4.919), seguido de adosados (405), locales (236) y unifamiliares (206). Las administraciones se lo están tomando con calma ya que únicamente 9 edificios públicos lo han presentado. Sí lo han hecho, entre otros, 7 hoteles y residencias, 2 edificios de oficinas y 2 centros docentes.