La alcaldesa de Aranda, Raquel González, ha reconocido que el equipo de gobierno asumió desde un principio el compromiso de la ampliación de la exposición de Las Edades del Hombre a la iglesia de San Juan, aclarando que si bien la pretensión municipal inicial llegó a ser tres sedes, ya que se aspiraba a incluir también la iglesia de San Nicolás de Bari, de Sinovas, el planteamiento de la Fundación Las Edades del Hombre, organizadora del evento, era reducir la muestra a la iglesia de Santa María por limitaciones presupuestarias.
Una propuesta que defiende en el interés de retener al visitante un mayor tiempo en la ciudad, invitándole de ese modo a conocerla en profundidad, consumir en sus establecimientos e incluso pernoctar. «El planteamiento de que San Juan fuese sede de Las Edades del Hombre es cierto que no se había barajado a priori por la Fundación y se hizo por parte del equipo de gobierno. ¿Y por qué? Pues porque entendemos que la persona que llega a la localidad y si la sede está solo en Santa María entra sale y se va. Y sin embargo, si le hacemos que se entretenga y vaya también a San Juan, entra por las callejuelas, empieza a conocer Aranda y se siente más atraído. El objetivo era fijar el que el turismo que llegase a nuestra localidad se quedase aquí», argumenta.
La primera edil explica que «sabíamos desde hace tiempo» que ese desdoblamiento de la sede conllevaba un sobrecoste, estimado en unos 300.000 euros, pero indica que desde el primer momento se confió en que se cubriría mediante la aportación de patrocinadores privados. Algo que hasta el momento ha sido imposible ya que solo se han recaudado 130.000 euros, por lo que en lógica la Fundación reclama ahora al Consistorio el controvertido pago de los 170.000 euros restantes.
«Asumimos el compromiso desde el convencimiento absoluto de que ese dinero se iba a conseguir a través de la iniciativa privada porque lo que nosotros queríamos por encima de todo es que las sedes fueran dos. Hemos estado trabajando para lograr que se subvencionara ese coste, pero la financiación se ha logrado solo en parte, si bien seguimos intentándolo. Yo estoy segura de que al final supongo que las sedes serán dos.Pero seguimos trabajando », indica.
Respecto al malestar de la oposición porque se les hubiera ocultado este compromiso hasta que prácticamente ya no ha margen de reacción, González lo achaca a que no se creyó que al final fuera necesario que las arcas municipales desembolsaran ninguna cantidad.Y respecto al hecho de que esta cláusula no figurara en la propuesta de convenio remitida en noviembre, ante lo que el secretario general de la Fundación, Gonzalo Jiménez, argumentó que se había acordado incluir a través de una adenda, la primera edil lo justifica en que aquel borrador, similar al firmado en el resto de la localidades que han acogido las Edades del Hombre, no contemplaba la iglesia de San Juan.
«No se les ha ocultado nada porque es la primera vez -por el miércoles- que se llevaba el convenio a comisión. Se ha llevado cuando se ha necesitado firmarlo. Y la primera propuesta de noviembre, no incluía San Juan. A lo largo del tiempo lo que hemos estado buscando es apoyos económicos para poder conseguir que las sedes fuesen las dos», esgrime.
OPTIMISMO
La regidora confía en que la oposición recapacite y respalde realizar la aportación, que aún espera que se pueda minorar y se prevé realizar con cargo a remanentes, en base al compromiso institucional asumido pero si, como manifestaron a DB, los cuatro grupos se pronuncian en contra es optimista respecto a que la Fundación no cumpla su amenaza de reducir Eucharistia únicamente a la iglesia de Santa María y que se pueda celebrar en las dos sedes, «aquilatando en algún aspecto», como reconoció que podría ser reestudiar aspectos como la decoración con estatuas de la calle San Juan que uniría las dos sedes, valorada en 30.000 euros, que a lo mejor se podría prescindir o eliminar algunos otros gastos más superfluos como la aplicación para móviles.
«Se lo plantearemos a la Fundación a ver de qué manera se puede resolver esa situación. Pero por el bien de Aranda y del turismo de la ciudad estoy segura de que finalmente las sedes serán dos y conseguiremos el objetivo de que la gente llegue y pase la jornada e inclusive el fin de semana. Esto se va a salvar», asegura con rotundidad.