En una de las semanas del año que más carne venden, los carniceros de Salas de los Infantes se encontraron ayer sin casi género que ofrecer a sus clientes. El motivo no es otro que el robo de alrededor de 120 animales, entre corderos y lechazos, que se produjo la madrugada del lunes al martes en el matadero de la localidad.
Al parecer, según cuenta Pedro Montero, concesionario de estas instalaciones municipales, los ladrones accedieron por la parte trasera del mismo, rompiendo los candados de la valla perimetral, de las puertas y de las cámaras frigoríficas donde se encontraba el género. «Se han llevado parte de las cabezas que había, pero no todas, lo que nos hace pensar que han cargado lo que les ha cabido en la furgoneta con la que llegaron», explica Montero, que ya ha denunciado los hechos ante la Guardia Civil, que ha comenzado la investigación, en la que puede servir la versión de algunas personas que afirman haber visto una furgoneta sospechosa.
El suceso se agrava por la época en la que se ha producido, vísperas de las fiestas de Salas de los Infantes y próximo a los días en los que más gente se congrega en los pueblos del entorno de la ciudad milenaria; por lo tanto, una de las semanas en las que más ventas tienen los comerciantes. «Es un problema gordo; a un carnicero le han faltado 20 lechazos, a otro 12, a otro 50… Ayer no pudieron vender y hoy tampoco podrán, por lo que ha supuesto un gran trastorno. Ahora se tendrán que pegar la paliza para buscar ganado que matar y nosotros para matarlo», cuenta el concesionario, que lamenta la situación por el malestar que ha ocasionado a sus clientes.
El suceso tuvo que producirse entre las 12 de la noche del lunes, hora a la que salió un empleado del matadero, y las 6.30 de la mañana, cuando Pedro Montero llegó allí y se percató de que los candados estaban forzados. Lo que no tienen claro es el destino de la mercancía robada. «La carne se estropea a los dos días y no creo que tenga una salida fácil en el mercador. Cada pieza, además, lleva el sello del matadero», cuenta Montero (exfutbolista), que dispone de un seguro que se responsabilizará del robo y que estima en 75 euros el precio de cada pieza robada.