Los precios de las verbenas se dispararon especialmente después de la pandemia debido a la desaparición de muchos grupos y a muchos profesionales del espectáculo no les quedó más remedio que cambiar de sector. Pocas son las orquestas que han nacido nuevas en los últimos tiempos y a eso se suma que cada vez se están profesionalizando más, lo que hace que este año se note una nueva subida del coste con respecto a la temporada pasada que repercute directamente en el bolsillo de los pueblos. Esa ley de la oferta y la demanda también genera que cada vez se cierren las fiestas mucho antes y que a estas alturas apenas haya fechas disponibles de cara al verano.

"Una orquesta que el año pasado costaba 3.500 euros pues ahora igual ha subido unos 800 euros, en agosto aumenta más y se nota mucho la diferencia", expone Héctor Cifrián, de Eventos Cooper. Además de la falta de grupos, también menciona que ahora repercutirá el hecho de que tienen más gastos, que cuentan con materiales más caros, que se aplicará la subida de la seguridad social o que el coste de los desplazamientos resulta más elevado. "Este año se está notando mucho la falta de orquestas y además cada vez se requieren más grandes, se han adelantado muchísimo los pueblos y desde diciembre o enero había muchas fechas ocupadas", afirma.

En esa misma línea, Gustavo Calvo, de Artistas y Orquestas, defiende que ahora los espectáculos que se presentan están más elaborados que los de hace unos años y que se realizan grandes inversiones puesto que los equipos de luz, sonido y pantallas también son muy costosos. "Aunque sea un poco caro creo que no se puede dejar perder, las fiestas también aportan muchos ingresos a las cantinas para que puedan aguantar el invierno y yo que llevo mucho tiempo en esto veo que eso es importante, mucha gente joven va a los pueblos para poder ir moviéndose cada fin de semana a otros de la zona", argumenta Calvo. Cree que desde las administraciones deben potenciar la cultura puesto que aportan "vida" al medio rural y supone un aspecto fundamental para que haya ambiente, al menos, en verano.

Ensayo ayer en Cogollos de la orquesta La Reina Show. - Foto: Luis López Araico

También desde Drumen's Espectáculos consideran que "los precios se han disparado porque hay menos gente para trabajar" y calculan que con respecto al año anterior se ha producido una subida del 20%. Coincide en que "la mayoría está ya cerrado" y que una de las novedades este año ha sido que se ha pisado el acelerador para contratar mucho antes. En esta época ya está casi todo cogido.

De cara a San Isidro, que se celebra en muchos municipios burgaleses el 15 de mayo, ha habido que adaptarse para poder conseguir orquestas para todos y algunos han optado por ponerla el sábado anterior (11) o el posterior (18), según explica Cifrián. "Para los fines de semana de agosto está ya todo prácticamente reservado, alrededor del 15 de agosto ya no encuentras nada", asegura. En cuanto a lo que se sigue contratando, las verbenas son la opción preferida. "Pero unas cuantas han cambiado el camión rígido por el tráiler", dice, en referencia a que cada vez se piden espectáculos mejores y por ello los grupos apuestan por invertir en mejores equipos.

Eso sí, aquellos municipios que tienen varios días de fiestas están incluyendo también algunas macrodiscomóviles con bailarines y charangas, aunque ambas opciones se han puesto muy de moda entre los jóvenes y también sus precios han aumentado considerablemente. En Melgar de Fernamental celebran Nuestra Señora de la Asunción, cuando media provincia está en fiestas. Así, el Ayuntamiento dejó los principales actos cerrados el pasado mes de septiembre. "Nos reunimos con los jóvenes y dejamos todo hecho pronto", comenta el concejal José Luis Ortiz, que cree que eso les ha venido bien para no sufrir la subida de costes de esta nueva temporada y han pagado prácticamente lo mismo que en 2023. Tendrán verbenas los días 14, 15 y 16, mientras que para el 17 prepararán una gran fiesta con dj's. Apostarán por las grandes orquestas un año más y esta vez acudirá por primera vez La Reina Show.

Hasta 15.000 euros se les ha disparado la fiesta a Belorado. Si el año pasado pagaron 42.000 euros esta vez les tocará desembolsar hasta 57.000. Contarán con dos verbenas (25 y 26 de agosto) para las fiestas de San Vitores y con otras tres verbenas y una macrodiscomóvil (29, 30 y 31 de agosto y 1 de septiembre) para celebrar las Fiestas de Gracias. "Es una pasada lo que ha subido, pero las verbenas son el corazón de la fiesta y si no hay eso es como otro fin de semana cualquiera con mucha gente", comenta Héctor Valgañón. Han tenido que modificar la partida de festejos puesto que "se ha disparado todo, hasta las charangas". Entiende que los trabajadores de este sector tengan que mejorar sus condiciones laborales, pero cree que también los precios siguen al alza porque los pueblos lo seguirán pagando al tratarse de una "tradición" que no se puede perder.

Lo que parece claro es que a los ayuntamientos les tocará este año ingeniárselas para tener unas celebraciones con la misma calidad. Óscar Alonso, de Pedrosa de Río Úrbel, argumenta que ellos han notado ese aumento de los costes y destinarán 1.000 euros más para contratar verbenas del mismo nivel que otros veranos. "Ha subido desorbitadamente, no sé si también en parte a que hay muchas subvenciones...", dice, mientras cree que siempre acaban perjudicados los pequeños pueblos.