La Diputación de Burgos y Caritas Diocesana han renobado esta mañana el convenio que mantienen desde hace 8 años para el desarrollo de actuaciones de carácter social en colaboración con los Centros de Acción Social de la provincia, complementando así los propios servicios que presta la institución provincial y agilizándolos en muchos casos, como reconoció el presidente César Rico tras la firma del convenio.
La atención y ayuda para la prestación de servicios funerarios a personas sin recursos, la formación ocupacional a personas en riesgo de exclusión y el impulso a los centros de menores de Villarcayo y Lerma son los tres ejes sobre los que Caritas desarrollará este año su actividad social, en un momento duro por la pandemia, como también lo fue el año pasado, según comentóJorge Simón, presidente de Caritas Diocesana, pese a lo cual, insistió, se han cumplido los objetivos que fija el convenio.
Simón destacó que ambas instituciones comparten las mismas preocupaciones, el interés por lo público, por el medio rural y por los desfavorecidos y que en esos tres motivos ambas encuentran el punto de sensibilidad para trabajar juntas. En cuanto a los centros de menores de Villarcayo y Lerma, que amplían su actuación al conjunto de ambas comarcas, Simón concretó que se atienden a 520 menores en ámbitos como consumo saludable, ayudas al estudio, la propia acogida y la ayuda a la inclusión social.