La Terminal de Contenedores Miranda (TCM) avanza en su proyecto logístico y está muy cerca de comenzar la segunda fase. En su afán por prosperar, la compañía pretende emprender dos cambios fundamentales. En primer lugar, desean construir otra vía de tren y, por lo tanto, duplicar su conexión desde la planta situada frente a Los Ángeles. Por otro lado, la empresa quiere aumentar el área en el que operar. Eso sí, esta parte del programa no implica la adquisición de más terrenos, sino que «acondicionarán» un fragmento dentro de los 175.000 metros cuadrados que tienen en propiedad.
La primera fase de la TCM se ha saldado con éxito. Según describen desde la empresa, ese tramo de su iniciativa «consistía en la construcción de la terminal, la consolidación de las conexiones y el crecimiento de negocio». Ahora mismo, ya tienen cifras suficientes para dar un nuevo paso, puesto que su «objetivo» sigue siendo el de «crecer».
Cuando la compañía presentó el modelo de TCM, antes de inaugurar la planta logística, ya adelantaba cómo debía desarrollarse la segunda fase. En la actualidad, han llevado a cabo los movimientos iniciales para implementarla, en tanto que ya estudian varios «proyectos» de contratistas. «Es decir, para decidir con quién acometemos la ampliación», aclaran. El crecimiento que quieren impulsar «consiste en la construcción de uno o dos nuevos tramos de vías de ferrocarril». Según dicen, «son tramos de 700 metros cada uno y probablemente se comience con un primer tramo en esta segunda fase». Además, «también se harían trabajos de ampliación y acondicionamiento de toda la zona logística».
El desarrollo de la fase 2 está ciertamente supeditado al estado en el que se encuentre el sector logístico. En este sentido, consideran que la escasez de maquinistas y de transportistas podría imposibilitar que se ejecute un incremento de trabajo antes de 2023. No obstante, su deseo pasa por empezar a mover más cargas en 2022.
A fin de cuentas, la ampliación de la zona de operaciones y la construcción de una segunda vía de tren está directamente relacionado con otras iniciativas que se deberían resolver «a corto y medio plazo». En particular, dichos modelos de negocio se resumen en «nuevas conexiones con Alicante, Algeciras y Ponferrada, por ejemplo». En esta última opción aún están «trabajando» y, por ende, «habrá que ver si se consolida para determinado tipo de cargas». No obstante, la decisión de «poner en marcha la unión Algeciras-Miranda y Miranda-Alicante» es firme.
Por tanto, las obras que la Terminal de Contenedores Miranda quiere llevar a cabo este año están motivadas por el incremento en la carga de trabajo que desea absorber la planta. Si se recibe un número de trenes mayor todavía, hacen falta unas instalaciones aún más dotadas. «Si se juntan más conexiones, necesitas la ampliación», resumen en TCM.
Ni el plazo ni el presupuesto de la segunda fase de la terminal han salido a la luz. Básicamente, porque todavía están revisando las propuestas con las que cuentan. Pese a ello, ya tienen la capacidad de adelantar que «va a ser una inversión importante». Aunque, eso sí, insisten en que antes «hay que asegurarse de que vaya a poder ejecutarse».