Los embalses se llenan con las últimas lluvias de 2021

L.M.
-

El de Arlanzón está al límite de su capacidad mientras que el de Úzquiza registra un nivel superior al de la media de los últimos diez años.Las previsiones para el verano son buenas

El embalse de Arlanzón lleva unos cuantos días a su máxima capacidad, 22 hectómetros cúbicos. - Foto: Jesús J. Matías

Las nevadas en la Sierra de la Demanda y las lluvias que cayeron en la provincia a finales del año pasado han provocado que los dos embalses burgaleses encaren el invierno en una situación óptima. El nivel de volumen embalsado que registran tanto Úzquiza como especialmente Arlanzón supera con creces la media de la última década y permite afrontar los próximos meses con esperanza.

Empezando por el más grande, el de Úzquiza, de los 75 hectómetros cúbicos de capacidad que atesora tiene en estos momentos cubiertos 64,9.El año pasado por estas mismas fechas, una vez la famosa borrasca Filomena hubo descargado sobre Burgos, esta instalación contenía 57,2 hectómetros. Es más, la media del último decenio fija en los 58,8 hm3 el promedio de agua embalsada.

Mucho mejor es la situación que presenta el de Arlanzón.De una capacidad mucho más reducida, unos 22 hectómetros cúbicos, se encuentra en estos momentos al 100% de su capacidad.Al ser el primero -tras él está Úzquiza- recibe antes el agua que mana de la Demanda, y la cantidad de lluvia caída en el final del 2021 permite que esté a pleno 'rendimiento'.

Las comparación tomando como referencia tanto el año pasado, 19,2 hm3, como la media de los últimos diez, 17,1 hm3, es siempre inferior a los registros actuales. Tal es la capacidad que la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) ha tenido que hacer labores de desembalsado de agua para evitar males mayores.

A pesar de que estas jornadas el anticiclón que se ha 'posado' sobre la provincia ha impedido nuevas precipitaciones, el deshielo de las cumbres más altas está permitiendo que el caudal aumente de manera semanal en una media de 0,5 hectómetros cúbicos, unos 500.000 litros. Sin embargo, la situación puede cambiar: si bien el de Úzquiza ha sumado 800.000 litros, el de Arlanzón ha perdido 300.000 -que se han vertido al caudal-. Ello puede indicar que el flujo de agua puede dejar de ser tan grande en los próximos días, aunque aún es pronto para averiguarlo.

Situación general. Si el panorama en los dos pantanos burgaleses es positivo, a nivel de Cuenca el balance es algo peor.El conjunto de los embalses registra menos volumen embalsado en estos momentos que el año pasado, aunque es ligeramente superior al de la media del decenio.

Actualmente son 1.780 los hectómetros cúbicos que atesoran las instalaciones de la CHD, con una capacidad total de 2.877 hm3. En esta misma semana del 2020 anotaban 2.052 hm3, mientras que la media entre 2011 y 2021 se fija en los 1.638.El peor porcentaje de ocupación lo registran las cuencas de Palencia -tanto el sistema Pisuerga como el sistema Carrión- y Salamanca -Águeda-.En el territorio vecino el agua embalsada apenas llega al 42% del total.