Lo que comenzó allá por la década de los años 30 del pasado siglo con 'Manolo el Carretero' en la pequeña localidad zamorana de Santa Cristina de la Polvorosa, un arriero que recorría las riberas del Órbigo y también del Tera intercambiando semillas de tomate, culminaba hace unos días, gracias al tesón, la sabiduría y al amor al terruño de Antonio Ramírez, con el reconocimiento de ser 'el mejor tomate de España'. Un premio conseguido por Ramírez en el festival celebrado en Torrelavega, considerado como un importante encuentro internacional que acoge a los mejores productores de tomate del mundo.
De haber vivido ese acontecimiento, el carretero zamorano se hubiera sentido muy orgulloso del trabajo hecho por este joven horticultor burgalés en su huerta de Pedrosa de Muñó para salvaguardar esa y otras más de 500 variedades de este fruto. Toño Ramírez presentó cuatro variedades a concurso, entre ellas esta 'Rosa Zamorano', y cuyas semillas consiguió gracias a su amigo Guti, nieto del arriero. «Es un tomate rosado tradicional de piel fina, forma aplanchada con un corte muy bonito porque tiene mucho jugo y poca semilla y muy equilibrado en cuanto al dulzor y la acidez. Deja un regusto muy intenso, muy largo y de mucho aroma», afirma. Unas cualidades que fueron muy alabadas por el jurado y que hicieron que se impusiera a nombres como David Agirre Unzueta de Aretxabaleta, un guipuzcoano que triunfa con sus tomates allá donde se presenta pero que esta vez se tuvo que conformar con el segundo puesto.
Este es el primer año que la asociación Huertos La Olmeda, de la que Antonio Ramírez es socio fundador, lo cultiva y ha logrado esta medalla de oro. Explica el horticultor que 'Manolo el carretero' cogía el tomate rosa, de calibre bueno y lo primero que hacía era meterle la uña a ver si la piel era o no era fina. «Cultivar este tomate y que haya ganado es un orgullo. Me emociona mucho», reconoce. Su cultivo lo ha hecho a lo natural, es decir, con la planta en el suelo, con riego deficitario para que alcanzara más sabor y sin poda. «Hemos producido poco este año porque hemos hecho una selección». Y es que el objetivo de Toño no es vender lo que produce sino conservar las semillas para que no se pierdan y puedan degustarlas generaciones venideras.
Pero no solo ese galardón se ha traído del certamen de Torrelavega. Por si fuera poco, también ganó la categoría internacional con el tomate pera verde. Una variedad que consiguió gracias a otro de sus amigos, Leo Sánchez, y que llegó de uno de sus viajes por el mundo. «Es un tomate muy jugoso, muy potente en salinidad y en dulzura. Al comerlo, marca mucho», describe. En el certamen nacional se presentaron un centenar de variedades diferentes y en el internacional, unas 80 procedentes de Uruguay, Chile, Francia, Italia y Portugal.
Toño Ramírez acudirá con sus tomates a la feria vallisoletana de Piñel de Abajo los días 24 y 25 y antes, el día 18, hará una exposición y cata en el restaurante El Majuelo, junto al parque Félix, en Gamonal.