La Comisaría provincial de la Policía Nacional vuelve a alertar sobre los riesgos que acarrea realizar inversiones a través de páginas que se anuncian en Internet tras recibir una denuncia por parte de un vecino de Burgos por una estafa de 121.000 euros en los últimos meses.
En la mayoría de los casos, detrás de estos portales se encuentran estafadores que adoptan el papel de un supuesto bróker y captan a sus víctimas asegurándoles una elevada rentabilidad que no existe mediante la inversión en criptomonedas o bitcoins.
Una vez que el inversor transfiere las primeras cantidades, el supuesto bróker se pone en contacto vía correo electrónico o llamada telefónica garantizándole seguridad y gran rentabilidad en esa operación. Lógicamente todo es falso. Aunque utilizan enlaces web donde la víctima puede ir viendo las elevadas ganancias que experimenta su inversión, lo cierto es que desde el preciso momento en que los estafadores tuvieron acceso al dinero, lo desviaron a cuentas bancarias de otros países. El afectado es consciente de la estafa cuando intenta recuperar su dinero y comprueba que no es posible.
La parte desconocida de este delito y segunda parte de la estafa comienza en ese momento. La víctima se convierte nuevamente en víctima de otra estafa, es decir, sufre una doble victimización. Mediante una llamada telefónica en nombre de una empresa, el comunicante le dice que son expertos en recuperar el dinero estafado. Le ofrecen a la víctima pagar una cuota para ser cliente y esta supuesta compañía se encarga de todos los trámites. A partir de ahí, una vez que han conseguido que el perjudicado vuelva a picar el anzuelo, los estafadores repiten el mismo procedimiento.
Solicitan a la víctima distintas cantidades de dinero, ahora, en concepto de 'impuestos del país donde tienen localizado el capital', que por supuesto le aseguran que en ese tiempo se ha incrementado a su favor.
Desde la Comisaría de Burgos se vuelve a incidir en el peligro de estas inversiones. Los investigadores especializados alertan sobre el procedimiento que siguen estos delincuentes para captar inversores:
- Eligen a personas que han consultado páginas de inversiones o se han inscrito en cursillos online para saber cómo obtener más beneficios.
- Si detectan desconfianza, se ofrecen y ‘adelantan’ una determinada cantidad.
- Los perjudicados son redirigidos a enlaces web donde observan como su dinero va creciendo. Envían pantallazos con datos, gráficas bursátiles y presuntos extractos de inversión.
- Una vez que disponen del dinero, lo transfieren a cuentas de países extranjeros y cuando las víctimas no acceden a sus peticiones, los delincuentes desaparecen de la red, igual que el dinero invertido.
- Contactan en nombre de una empresa y se ofrecen a recuperar el dinero a cambio de una cuota primero, posteriormente solicitan cada vez más dinero.