Las Cortes de Castilla y León rechazaron hoy la moción de censura del Grupo Socialista contra el gobierno de Alfonso Fernández Mañueco y Francisco Igea, que seguirán en la Junta. La iniciativa del PSOE cosechó 41 votos en contra de los procuradores de PP y Ciudadanos y Vox, frente a los 37 a favor del PSOE y Podemos y las tres abstenciones de UPL, Por Ávila y la parlamentaria no adscrita María Montero, que abandonó la filas de Cs.
Por lo tanto, pasadas las 19.36 horas, el presidente de las Cortes, Luis Fuentes, informó de que la moción de censura, la primera en la historia de la Comunidad, había sido rechazada al no otorgar la cámara la confianza necesaria al candidato socialista Luis Tudanca, que no alcanzó los 41 votos necesarios, como recoge Ical.
La votación, iniciada por orden alfabético mediante sorteo, la abrió la socialista Patricia Gómez Urbán y se vivió un momento de tensión cuando la zamorana Leticia Sánchez (PP) dijo "sí", para a continuación votar "no". Además, se contabilizaron dos votos telemáticos, el del procurador de Cs por Burgos José Ignacio Delgado, que votó en contra, y la del socialista salmantino Fernando Pablos, lo que obligó al presidente de las Cortes a decir “sí” entre risas a sus señorías.
Tras votar los procuradores y los miembros de la Junta lo hicieron los integrantes de la Mesa de las Cortes, siendo el último su presidente Luis Fuentes, quien fue el encargado de informar del resultado de la votación, con la que se puso punto y final a una jornada maratoniana en el parlamento autonómico, en el que tan solo al final los procuradores ocuparon sus escaños para votar y en la que se hizo uso de la mascarilla en todo momento debido a las restricciones del COVID-19.
El presidente de las Cortes levantó la sesión con un mensaje de alabanza al comportamiento de los procuradores y valoró el “tono constructivo” y las “formas” de todos, porque consideró que desde Castilla y León se dio hoy un “ejemplo” a toda España sobre cómo hacer un “buen debate parlamentario”. A continuación los socios de gobierno PP y Cs y los socialistas rompieron en aplausos a sus líderes.
Este este pleno extraordinario comenzó a las 09.00 horas con la intervención de la procuradora socialista Ana Sánchez, secretaria de Organización del PSOE de Castilla y León, quien en la presentación de la moción de censura llamó a los 81 procuradores de las Cortes a “votar en conciencia” porque en su mano -dijo- está decidir entre “perpetuar” la corrupción o devolverle a la Comunidad la “decencia”, que destacó encarna Luis Tudanca, a quien definió como el “líder social” de la Comunidad.
Cambio
El candidato socialista, Luis Tudanca, desgranó su alternativa para que Castilla y León tenga futuro ante un Gobierno que se mueve entre “la soberbia y la indolencia” y que se ha enfrentado con todos los sectores de la Comunidad y pidió que “aquí y ahora la corrupción” del Partido Popular “merece un castigo ejemplar” con el cambio de gobierno de su moción de censura.
Recuperar el consenso, la política de la palabra dada, el cumplimiento de los acuerdos que se firman, la unión en la lucha contra la pandemia y la credibilidad política de las instituciones fueron algunos de sus compromisos. “Ustedes eligen, el destino y la historia les juzgará”, remató.
Sin embargo, el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, le acusó de “alentar” el transfuguismo y de presentar una moción de censura gestada en La Moncloa y en la sede federal del PSOE desde “el seguidismo” a Pedro Sánchez, en defensa de sus intereses en vez de los de Castilla y León.
Fernández Mañueco criticó que se plantee cambiar “estabilidad por incertidumbre” y el cambio de un “proyecto útil por un modelo fracasado” y defendió las políticas de transformación y cambio que aplica el Gobierno que preside, así como que el pacto de gobernanza con Ciudadanos se cumplirá la legislatura.
Los procuradores de UPL, Luis Mariano Santos, y de Por Ávila, Pedro Pascual, se abstuvieron, ya que para el primero argumentó que no iba a “aupar” a alguien que no es receptivo con el leonesismo y el segundo aseguró no ver “viable” el proyecto de Tudanca, pero también advirtió a la Junta que su posición “no es una carta en blanco”.
La procuradora de Vox, Fátima Pinacho, afirmó que no iba a dar el apoyo a un gobierno socialcomunista, que el socialista tampoco hubiera aceptado, pero se mostró critica con el presidente de la Junta, cuya dimisión volvió a pedir así como la convocatoria de elecciones, aunque reconoció que Fernández Mañueco no las adelanta por no tener la seguridad de ser el candidato.
Solo Pablo Fernández (Podemos) apoyó la moción de censura “por higiene democrática” y elogió la dignidad y decencia del socialista, después de compartir ambos un cambio en las políticas desde el progreso y la izquierda. “No gana hoy un gobierno, pero gana algo más importante, tiene credibilidad”, sentenció.
Por su parte, el portavoz de Cs, David Castaño, que se desmarcó de casos de corrupción del PSOE sin mencionar los que afectan al PP, afeó que se haya presentado la moción sin querer sentarse con su grupo y rebatió que quien votó a Cs quería que Igea fuera presidente como quien votó a los socialistas apoyaban que lo fuera Tudanca.
“Hicimos bien en no pactar con usted, nos separa un abismo”, sostuvo Castaño, que restó importancia a las propuestas presentadas por el candidato e incluso ridiculizó su apelación al cambio, así como que la única propuesta es “no ser del Partido Popular”. “No he visto jamás que me pidan el voto insultándome”, zanjó.
También, el portavoz del Grupo Popular, Raúl de la Hoz, calificó como “espectáculo grotesco” la moción de censura presentada por el PSOE, con “artimañas urdidas” en Madrid y aprovechando “la desgracia” de las personas por la pandemia por ser “dócil” con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Tudanca le advirtió hoy de que se va a quedar en la Comunidad para defender su alternativa, después de que De la Hoz le criticara por presentar “una moción de censura imposible”
Finalmente, la viceportavoz del Grupo Socialista en las Cortes, Virginia Barcones, llamó a todos los procuradores de la cámara a realizar un último “examen de conciencia” para aprovechar “la oportunidad para la alternancia después de 33 años de gobierno del Partido Popular”.