Para un colectivo tan maltratado como es el de los letrados de oficio el reconocimiento que supone que su ciudad les dedique una plaza «tiene mucho valor». Y así lo expresó ayer la nueva decana del Colegio de Abogados de Burgos, Mónica Pérez Villegas, quien recordó que los profesionales que dedican su tiempo a la justicia gratuita «son el corazón de la Justicia», quienes dan cobertura legal «a quienes más lo necesitan en aras de la igualdad social».   

Efectivamente, Burgos ha puesto el nombre de Plaza del Turno de Oficio al espacio que se abre frente al edificio de los juzgados de la avenida de los Reyes Católicos. Ayer se celebró el acto de inauguración, al que asistió la presidenta del Consejo General de la Abogacía Española, Victoria Ortega; el alcalde de Burgos, y una representación de los letrados y los procuradores de Burgos, entre quienes estuvieron Guillermo Plaza o Elías Gutiérrez.

El día elegido fue precisamente el que el calendario tiene reservado para homenajear a quienes forman parte del turno de oficio, de modo que también era una jornada para expresar reivindicaciones. Y en esta ocasión el colectivo estaba cargado de razones, puesto que el Ministerio lleva cinco meses sin abonar las cantidades que adeuda a los abogados burgaleses. El Colegio ha adelantado el dinero correspondiente a los asuntos que los profesionales llevaron en los meses de febrero y marzo, pero todavía quedan por pagar abril, mayo y junio. Y dentro de poco, julio.

La «excusa» que ponen ahora desde Justicia, advierte el anterior decano, Guillermo Plaza, es que «se está implementando el sistema de gestión Pericles, que cuando detecta cualquier fallo de facturación deja de pagar todo el montante que corresponde a un Colegio». «Pero es un pretexto, porque en otras épocas se alegaban otras cosas», añade.

Por su parte, Pérez Villegas subrayó que el Colegio «puede hacer frente al adelanto de los pagos, porque se halla en una buena situación financiera, pero instituciones de otros territorios tienen muchos problemas y no tienen opción de hacer tal cosa». 

Estas críticas se refieren solo a la demora en el abono de las minutas de los abogados de oficio, pero los letrados de Burgos insisten en una reivindicación histórica: la de que las Comunidades autónomas que aún no tienen las competencias transferidas y dependen del Ministerio igualen los baremos del turno de oficio con los territorios que dependen de sí mismos. En un provincia como Burgos, «los abogados  son testigos excepcionales de esta discriminación, pues un letrado de Miranda contempla cómo un compañero de Vitoria cobra el triple que él por ejercer a 30 kilómetros, en España, que no estamos hablando de otro país», se queja Pérez Villegas. En su opinión, «no se trata solo de cobrar más sino de dignificar el trabajo que hacen cientos de abogados de Burgos y que se debe valorar por el Ministerio de Justicia». «No somos abogados de segunda», sentencia.