El sector turístico de Aranda y la Ribera del Duero vislumbra su nueva normalidad. Atrás quedan esa especie de travesía en el desierto y meses de restricciones por la pandemia. Tras un "buen verano", hoteles y casas rurales destacan el tirón que les proporcionan los distintos eventos que se realizan prácticamente cada fin de semana en el circuito de velocidad Kotarr, en la localidad de Tubilla del Lago, o la IV Gran Fiesta de la Vendimia que se celebrará este fin de semana. Actos que les ayudan a consolidar la recuperación de los viajes nacionales y alargar la buena racha de la época estival.
Desde Acriduero, una asociación que engloba a 24 casas rurales de distintas localidades ribereñas como Tubilla del Lago, Valdeande, Espinosa de Cervera, Baños de Valdearados, Vadocondes o Villanueva de Gumiel, subrayan que este fin de semana rozan el lleno. Sólo hay hueco en un alojamiento. Como ya sucedió en los dos anteriores fines de semana, la elevada ocupación se debe, en parte, a la actividad en Kotarr. "Es una pasada la cantidad de gente que mueve", asegura su secretaria, Ana Belén Velasco.
Si hace quince días albergó la Cencerro Race, el fin de semana pasado hizo lo propio con una serie de tandas privadas nocturnas. En esta ocasión, para el sábado tienen previsto un evento llamado Dale Zapatilla y el domingo, otra tanda de coches. En este sentido, Velasco pone como ejemplo que el 80% de las reservas que se generan en una casa rural de Valdeande "son gracias al circuito".
Algo similar sucede este fin de semana en el Hotel Los Rastrojos, en Aranda de Duero. El elevado número de reservas corre a cargo de aficionados al mundo del motor. Sea como fuere, desde el establecimiento aplauden que haya eventos que ayuden a generar ambiente una vez que acaba el verano. Al final, como remarca la secretaria de Acriduero, "después de tantos meses de incertidumbre, da mucha felicidad ver que la situación se regenera y se estabiliza". De hecho, Velasco apunta que el último trimestre del año "es el mejor" para las casas rurales, por ser el otoño una época más propicia para el turismo de interior, visitar viñas o realizar rutas de senderismo. "De siempre, a partir de ahora arranca nuestra mejor época", acentúa.
En menor medida, la IV Gran Fiesta de la Vendimia también ha contribuido a sumar reservas, no tanto en casas rurales, pero sí en hoteles y apartamentos turísticos de Aranda. En el Hotel Julia indican que han registrado reservas con más antelación que otros años, una vez que se conocen las fechas del evento, y que apenas quedan habitaciones libres. "El sábado es el punto fuerte. Estos actos generan interés y dan mucha vida a la ciudad", aplauden al respecto.
También en el Hotel Aranda esperan un fin de semana positivo en cuanto a ocupación, en parte por la Fiesta de la Vendimia y también por el buen tiempo. Algo similar sucede en Tudanca, Montermoso o Villa de Aranda. En cualquier caso, muchos hoteles precisan que desconocen si quienes han reservado acudirán o no a la Fiesta de la Vendimia. El hecho de que haya aforo limitado como medida anticovid y que sea obligatorio adquirir entradas para asistir a los conciertos y espectáculos de humor a diferencia de años anteriores, en los que este tipo de eventos se celebraban por el centro de Aranda, podría haber desanimado a parte del público, según indican desde el sector.
Impulso a la hostelería. También la presidenta de la Asociación de Hosteleros de Aranda y la Ribera (Asohar), Nuria Leal, valora positivamente este tipo de eventos, que atraen a visitantes hasta la comarca y representan un impulso a nivel económico.
"Estamos a las puertas de un fin de semana en el que se nota que será la Fiesta de la Vendimia, la gente tiene ganas de salir, de hacer enoturismo y turismo de naturaleza", sostiene, al tiempo que defiende que desde Asohar apoyan todo tipo de eventos que promocionen y revitalicen la comarca.