Ojo Guareña se dispara a 10.000 turistas en agosto

A.C.
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Madrileños y catalanes multiplicaron su presencia en las cuevas y se pusieron por delante de vizcaínos y burgaleses en un verano, en el que se volvió a tocar techo con 17.105 visitantes entre julio y agosto

Ojo Guareña se dispara a 10.000 turistas en agosto - Foto: Luis López Araico

En 2016, la cueva de San Bernabé, el mayor atractivo turístico del espacio natural de Ojo Guareña, recibió 5.558 visitantes más que el año anterior. Fue el año del despegue. Desde entonces la llegada de turistas no ha parado de crecer, siempre que la pandemia lo ha permitido. Este verano, las cifras han vuelto a ser de récord con un total de 16.122 visitantes, de los que 6.236 se contabilizaron en julio y 9.886, en agosto. En 2020 fueron 14.048 y en el de 2019, el último sin covid, solo 12.862. La coordinadora de las cuevas turísticas de Ojo Guareña, Clara López de San Vicente, asegura haber vivido un verano «tremendo», en el que los guías se han visto desbordados de nuevo por el trabajo y  «cinco veces más de turistas se han quedado sin poder entrar».

Durante 22 jornadas del verano se colgó el cartel de no hay entradas antes de que acabara el día. Muchas veces a media mañana ya no se podía dar cabida a más peticiones, a pesar de extender los horarios al máximo y permanecer abiertos sin cierre al mediodía los fines de semana. Sin las limitaciones de aforo impuestas por el coronavirus, que obligaba a reducir los grupos a 29 personas cuando antes alcanzaban los 35, las estadísticas se hubieran disparado.

López de Vicente confía en que el fenómeno Ojo Guareña «viene para quedarse» y no solo es fruto del cambio de hábitos vacacionales de los españoles para esquivar la covid-19. No obstante, espera que «estos buenos datos de julio y agosto se extiendan al resto de meses del año».

Este verano, ha sido también el del desembarco de madrileños y catalanes, que han multiplicado su presencia en Sotoscueva. Por primera vez, los madrileños han sido los más numerosos y han representado el 21% de los visitantes del mes de agosto seguidos de los vizcaínos, el 17%. En tercer lugar y, por delante de burgaleses, cántabros o vallisoletanos, han estado los turistas llegados de Barcelona, que han sumado un 8%. Estos porcentajes están muy por encima del 3% que representaban los catalanes hace solo cinco años o el 15% que sumaban los madrileños.

El volumen de trabajo en aumento y los cambios de normativa se han traducido en que la temporada arrancó en abril con tres guías que subieron a cuatro en junio y a cinco en julio. Las cuevas abrieron este año con un aforo máximo permitido de cuatro personas por grupo que en mayo subió a 9;en junio, a 14;y el 18 de julio, a 29. Aún así las cifras de julio y agosto dejan muy atrás el último verano sin covid, el de 2019, y mucho más los de estíos anteriores.

En Cueva Palomera han entrado este verano 983 personas frente a las 1.388 del pasado, al no haberse podido realizar la visita larga por cuestiones de organización. Así, el total de los visitantes de Ojo Guareña llegó a 17.105. En lo que va de año alcanza los 22.143, lejos de estadísticas pasadas por los cierres de fronteras de la primavera.