El Burgos CF Promesas está a punto de estrenarse en la que será su segunda campaña en la Segunda RFEF, que a su vez será la primera como filial del club blanquinegro después de unas negociaciones que ocuparon gran parte de la campaña pasada. Con Carlos Aguilera manteniendo su papel de jefe en el banquillo, la plantilla, formada de una manera «mucho más meditada y extensa» en el tiempo que en ocasiones previas, destaca por su juventud y por su potencial, a pesar de que todavía necesite algunas piezas para poder cerrarse.
«Hemos hecho una renovación profunda. El objetivo era rejuvenecer al equipo», confirma Aguilera, que dirigió el curso pasado a solo seis jugadores que este año continúan. Veteranos como Dani Burgos, Sergio Esteban (lesionado) o Gabri ejercerán de líderes en un vestuario en el que también siguen jóvenes como Pol Bassa, Marcos Gil o Saúl del Cerro. Este último, junto al también prometedor Javier López-Pinto, ha estado entrenando bajo las órdenes de Calero en el primer equipo.
El resto de integrantes del filial blanquinegro son recién llegados, y todavía están por llegar varias piezas que el técnico considera necesarias para rematar el proyecto. El lateral derecho, el mediocentro y la banda son zonas en las que espera que lleguen refuerzos, aunque estos puedan no hacerlo de manera inmediata, pues se peinará el mercado de jugadores sin equipo, al cual se puede acudir en cualquier momento.
De esta manera, la aspiración un año más es «la permanencia, pero también queremos potenciar jugadores que puedan ayudar al primer equipo y que echen una mano cuando lo necesiten. Queremos que traten de proyectarse», añade el entrenador, que considera el hecho de la salvación «muy interesante para el club» ya que «cuanto más cerca esté el filial del primer equipo más capacidad habrá para traer jugadores jóvenes interesantes».
Nuevo grupo. Aunque el año pasado el equipo de Aguilera compitió en el Grupo II, en el que se encuadran todos los equipo vascos, este año lo hará en el Grupo I, donde juegan los gallegos. Una diferencia sustancial que cambia por completo los rivales, los desplazamientos e incluso el estilo de juego.
«Este año nos han cambiado de grupo. A nivel logístico antes era ideal porque los desplazamientos eran muy cortos. Ahora son extremadamente largos, mismamente en la segunda jornada tenemos que ir a Compostela. Es una mayor preocupación el cambio de grupo», asegura Aguilera, que ve en el nuevo grupo «más calidad, más juego combinativo», pero menos «potencial físico». Por ello, su equipo se tendrá que adaptar, y deberá hacerlo pronto: mañana sábado debuta ante el Marino de Luanco.
«Un equipo de fútbol debe llegar a todo. Polarizar o encasillarnos no me gusta. Jugar bien al fútbol es dominar las circunstancias que hay en cada momento», y eso intentará su equipo para asegurar la permanencia.
La plantilla:
Porteros: Jona Morilla, Álvaro Hormiga, Adrián Juárez y Loïc Badiashile*
Defensas: Dani Burgos, Sergio Esteban*, Román Rodríguez, Pol Bassa, Fernando Peralta, Dani Munguía, Alejandro Marcos, Iván Martínez y Francisco Javier Vertiz.
Centrocampistas: Santiago Pérez, Hassane Adamou, Marcos Gil, Saúl del Cerro, Marino Illescas, Javier López-Pinto y Erik Rafael.
Delanteros: Gabri Ortega, Óscar González, Lucas Ricoy y Jesús Jiménez
*Jugadores lesionados