'¿Dónde estabas tú el 15 de agosto del 2021?'. Parece el sugerente título de una novela o una canción romántica pero, gracias al posicionamiento geográfico de personas que permite la telefonía móvil, la respuesta a esta pregunta es hoy una realidad matemática, puro dato. Tenemos la foto fija de la festividad de la Virgen, el día más emblemático del verano burgalés (con permiso de las restricciones de la pandemia), y la conocemos gracias al estudio experimental que está desarrollando el Instituto Nacional de Estadística (INE) a raíz de los confinamientos, en colaboración con los principales operadores de telefonía móvil, concretamente, Telefónica, Orange y Vodafone.
El 15 de agosto coincidió esta año en domingo y fue una jornada típicamente veraniega en Burgos (aunque ha habido años de chaqueta...). Se alcanzaron los 33,1 grados de temperatura media y el riesgo de incendios estuvo en su máximo nivel. La mínima nocturna estuvo en los 15,2 grados, benigna para que lo que se estila en esta tierra. Y no son los únicos datos extraídos de esa jornada...
Pese a que las restricciones por la pandemia aún estaban plenamente vigentes, el día se caracterizó por una gran movilidad de los teléfonos guardados en los bolsos y bolsillos del pantalón. De hecho, la provincia rozó los 400.000 habitantes, 40.890 más que los recogidos en la última actualización del padrón oficial.
Pero la suspensión de las fiestas patronales, la prudencia en los viajes y en las reuniones familiares y toda las precauciones generadas por la pandemia se notaron de manera importante. De hecho, los datos de telefonía móvil del 15 de agosto de 2019 recogidos por el INE indican que durante esa jornada del año previo a la crisis sanitaria la provincia superó los 400.000 habitantes, 77.740 más que los reflejados en su padrón, lo que supuso un incremento del 21,78% en su población total, diez punto porcentuales por encima de lo registrado este año.
Un año antes, en 2020, el 15 de agosto empezaban los primeros casos de nuevos brotes de la pandemia que afectarían de lleno a la población en octubre y finales de año. Aquel Día de la Virgen la provincia ganó un 10% de población, 36.353 habitantes, muy lejos de los registros de 2019.
Los pueblos más visitados. Dicho esto, los satélites detectaron en el último verano zonas rurales que doblaron e incluso triplicaron su población. El movimiento de los teléfonos móviles activos permite identificar cuáles.
A la cabeza, el Valle de Valdebezana, que incrementó un 326,13% su censo, pasando de los 4.593 habitantes estables a los 19.342 en este día de agosto, según el INE. Oña se multiplicó un 220,91%, hasta los 17.050; Salas de los Infantes y su comarca, un 191,31% (14.557); Villarcayo, un 186,25% (34.029); Huerta de Rey, un 133,67% (12.048) y Medina de Pomar, un 131,07% (17.050).
Por encima del 100% de crecimiento en población y visitas también se situaron Sasamón y su comarca (122,38%, 11.388 personas) y Santa María del Campo y su entorno (121.76%, 10.658).
Quintanar de la Sierra (9.344) y Lerma (10.611) crecieron un 96%, Belorado alcanzó un 91,92% más (10.350) y Roa un 82,62% (9.865). Fuentespina (75,21%, 10.604), Valle de Mena (72,38%, 6.559), Condado de Treviño (61,34%, 3.009) y también Ibeas de Juarros (46,51%, 5.513) también sumaron extraordinariamente.
Aunque buena parte de estos números los integran los visitantes venidos del País Vasco y Madrid, principales referentes de la emigración en Burgos, también hubo municipios en la provincia que restaron mientras otros se multiplicaban.
Capital. A la cabeza de los saldos negativos, la capital, que en el día que marca la mitad del mes de agosto menguó un 37,46%, lo que en cifras absolutas son 66.000 vecinos que tomaron el coche para pasar el día fuera en el pueblo, en otra capital o en las playas.
Curiosamente, el 15 de agosto de 2019 hubo más capitalinos que optaron por quedarse en casa. Entonces, la festividad cayó entre semana, en jueves, y la población de la ciudad disminuyó un 28,77%, lo que supone 50.600 vecinos menos, lejos de los 66.000 de este año.
Pero la foto fija del INE detalla aún más esa fuga de vecinos en 2021. En el distrito 7 (zonas del Crucero y San Julián), la desbandada fue generalizada, un 62,31% menos de vecinos el 15 de agosto. Le sigue el distrito 9 (Gamonal y Capiscol), que redujo un 45,43% su vecindario, y el 8 (Castellana, Huelgas, San Pedro ySan Felices) y el 3 (San Pedro de la Fuente, Fuentecillas) que sufrieron una merma del 37%, respectivamente.
En el alfoz ocurrió algo parecido pero con menor intensidad: Quintadueñas y Cardeñadijo mermaron su población un 7,3% y un 3,9%, respectivamente.
Miranda y Aranda, los grandes núcleos poblacionales de la provincia, también vivieron el estío del 15 de agosto reduciendo su vecindario en un 12,4% y un 13,1%, respectivamente.
Otros destinos. El estudio de movilidad del INE se basa en los datos de la población residente, en los teléfonos de marcación nacional. Y no solo permite una foto fija de una provincia sino también de los desplazamientos que hace sus habitantes, en este caso los burgaleses, fuera de sus fronteras locales.
Los datos demuestran que los destinos más elegidos el 15 de agosto fueron Madrid capital (donde se localizan 1.769 burgaleses), Santander (1.020), Gijón (520) y Benidorm (446). Les siguen, por este orden, Torrevieja, Valladolid, Bilbao, Barcelona, Alicante, Valencia, Marbella o San Sebastián, entre otras capitales.