En 2008, el Museo Histórico Italiano de la Guerra ubicado en el castillo de Rovereto, en la provincia de Trento, realizó una exposición temporal que tenía como protagonistas las fotografías, vestigios y memorias de los legionarios de Trento que participaron en la Guerra Civil española en defensa «de la ideología fascista». El cartel de la muestra tenía como protagonistas cinco soldados de la división Fiamme Nere (Flechas Negras) posando ante una roca con sus nombres y la simbología fascista. Cuando el investigador medinés Chelu García Ruiz la vio sabía que ese icono estaba en Las Merindades, porque el 1 de agosto de 1937, fecha grabada en él, los soldados italianos se situaban en la comarca a la espera de tomar la ciudad de Santander. Desde entonces no había parado de buscarlo. Lo encontró en noviembre gracias a Epifanio López, natural de San Martín de Porres, quien le guio por el monte hasta dar con el que García considera el mejor de los treinta iconos italianos que ha inventariado.
En el reportaje sobre iconografía italiana y las trincheras de la Guerra Civil en la comarca publicado por este periódico el 3 de octubre apareció la imagen y Epifanio López llamó a DB, quien puso en contacto a ambos. Una vez en el lugar donde recordaba haberlo visto en su juventud, antes de emigrar a Barcelona, tuvieron que pasar una hora rebuscando entre las rocas. Bajo la árgoma, rodeado de vegetación y árboles de los que en 1937 no había ni rastro, García pudo descubrir la deseada roca, que junto al resto de grabados serán documentados esta primavera por la arqueóloga Amalia Pérez-Juez Gil y su equipo.
García Ruiz explica los motivos del valor del icono. El hecho de contar con una imagen de sus autores posando junto a él ya es muy importante, porque nada se sabe de quienes esculpieron el resto. Además conserva grabados sus nombres, Rebuggi, Holzer, Gentilini, Fedrizzi y Fruzetti, y su provincia, Trento, algo que nunca aparece en otros. Junto a todo ello, la roca reúne todo tipo de simbología fascista y un busto de Mussolini (Dux). Esta vez fueron DB y Epifanio. En otras ocasiones le ayudaron David, de Cabañas de Virtus, Iñaki de Soncillo o Carlos Isla, de La Paloma. En ocasiones, dio con los iconos en sus largas búsquedas por el monte.
Este sábado, a las siete de la tarde, Chelu García y Amalia Pérez Juez hablarán en el Ateneo Café Universal, de Medina de Pomar, sobre la iconografía que dejaron los italianos en la comarca, donde 35.000 soldados enviados por Mussolini se apostaron durante la primavera-verano de 1937. La experta en la arqueología como recurso turístico y el investigador han pensado en estos restos de la contienda española como un atractivo turístico, aunque habrá de estudiarse como mostrarlos para evitar que sean dañados. Desde el puesto de guardia de San Martín de Porres, los italianos vigilaban el paso de la Engaña. En un roca cercana aún se ven los impactos de bala que cruzaron con los republicanos. García seguirá investigando sobre un tema que le apasiona y sobre el que prepara, junto a Josu Aramberri, un nuevo libro dedicado a la memoria de los soldados italianos en Merindades.