La cuarentena, en su caso, fue positiva. Y no hablamos de un encierro obligado por la pandemia, sino de la entrada en las cuatro décadas por razón de edad. El arquitecto burgalés Enrique Jerez ha sido galardonado en los premios ‘Europe 40 under 40’, que premian a 40 profesionales menores de 40 años en el campo de la arquitectura o el diseño y cuyos proyectos se consideran "destacados y originales".
El galardón lo concede el Centro Europeo para la Arquitectura, el Diseño de Arte y los Estudios Urbanos junto con el Museo Ateneo de Chicago para la Arquitectura y el Diseño. Es la segunda vez que un burgalés obtiene este reconocimiento, tras el único precedente de Jorge Tárrago en el año 2010.
El premio de Jerez reconoce en concreto tres proyectos desarrollados a lo largo de los últimos años con la intervención de este profesional licenciado en Navarra y doctorado en Valladolid, que ha impartido clases en la Universidad de Burgos, en la de Navarra o en la propia escuela vallisoletana.
Por orden de antigüedad encontramos primero la llamada ‘Casa Domínguez’ que es una vivienda particular construida en una urbanización de Simancas (Valladolid); le siguieron en el tiempo los pabellones de vigilancia de los Bienes de Interés Cultural en Castilla y León, y finalmente la reforma llevada a cabo hace muy poco para la reapertura del restaurante Cobo Estratos, en la burgalesa plaza de la Libertad.
En equipo. Jerez es uno de los seis españoles galardonados en la edición de 2020 (precisamente el año que él cumplió las cuatro décadas), cuyo fallo se dio a conocer esta misma semana, y entra así a formar parte del grupo de "figuras en ascenso" dentro del sector, como los define la organización. Los galardonados protagonizarán una exposición conjunta que tendrá lugar en noviembre en Atenas, donde también se llevará a cabo la entrega oficial de los premios.
El arquitecto burgalés considera que un premio así es el reconocimiento a "un estudio muy pequeñito pero que trata de hacer una labor de calidad". Subraya además que los tres proyectos seleccionados "están hechos en equipo", y por eso menciona específicamente la intervención de José María Gastaldo en la Casa Domínguez, la de Koldo Fernández Gaztelu en los pabellones de vigilancia y las de Álvaro Moral y Víctor Manzanedo en el proyecto del restaurante.
"Ninguno de ellos son proyectos de gran escala, pero responden de una manera bastante directa a cada problema concreto y a necesidades muy distintas". La vivienda, por ejemplo, fue un encargo de hace 10 años donde se conjugan un aspecto robusto de hormigón exterior con un interior muy soleado y abierto, con vidrio y mucha luz. Los pabellones ya han sido expuestos en la última Bienal de Arquitectura, dentro de una selección de 50 obras de toda España. Y el Cobo Estratos es tan reciente que no ha sido todavía incluido en ninguna publicación especializada.
Todos ellos tienen en común, según su autor, "la importancia de tener buenos clientes que te den libertad y que te permitan trabajar, porque cada proyecto consiste en empezar casi de cero, pues por ejemplo nunca había hecho algo como los pabellones ni tampoco un restaurante". Por eso insiste en que, a su juicio, el reconocimiento obtenido lo es "a una manera de trabajar con proyectos hechos al detalle, con cariño y a propósito como si cada uno fuera el primero".
Una próxima generación creativa. Tal y como explican sus responsables, los ‘Europe 40 under 40’ son un programa anual "para destacar y distinguir a la próxima generación de arquitectos y diseñadores que tendrán un impacto en los entornos de vida y trabajo, las ciudades y las zonas rurales del futuro. La describen nada menos que como una celebración anual de innovación y creatividad" y está abierto a "jóvenes arquitectos, paisajistas, urbanistas y diseñadores industriales menores de 40 años que trabajen de forma independiente, en una empresa o en un proyecto específico como diseñadores principales".