Cada año se diagnostican en España entre 21.000 y 23.000 mujeres con cáncer de mama, la gran mayoría en estadios precoces, y aunque no se garantiza siempre la recuperación, los datos hablan de que hasta el 85 por ciento de las pacientes se curan, según explicó ayer el jefe del Servicio de Oncología Médica de MD Anderson Cancer Center Madrid, el doctor Antonio González.
Con motivo del Día Mundial del Cáncer de Mama, que se celebra hoy, este experto recordó que esta dolencia es el tumor más frecuente entre las féminas occidentales, pero «su tasa de curación es de las más altas que tenemos hoy en día», aunque, para ello, es necesario incidir en la detección rápida.
En el mundo, según datos de la Organización Mundial de Salud, cada año desarrollan más de un millón de nuevos casos y 458.000 fallecimientos por esta enfermedad. La mayoría de las muertes se producen en los países de ingresos bajos y medios, donde las pacientes se diagnostican en estados avanzados debido a la falta de sensibilización y a los obstáculos al acceso a los servicios de salud. En caso de España el nivel «es muy bueno» tanto en la detección, como el diagnóstico, como el tratamiento con respecto a otros países. Y es que «en el año 2000 solo el 33 por ciento de las mujeres se realizaba una revisión, mientras que en 2010 el porcentaje llegó al 55. Evidentemente hay que seguir aumentando e incidiendo en el mensaje en este sentido», aseveró.
No obstante, el médico insistió en la importancia de informar e incidir en la realización de esta prueba de forma periódica a partir de los 40 años, algo que debe ser imprescindible a partir de los 50. «La única técnica que reduce realmente el riesgo de mortalidad es la mamografía», aseveró González, que no quitó valor a la autoexploración, aunque a su juicio, «es una práctica grosera y complicada para poder señalar que «reduce de forma real» la mortalidad en cáncer de mama. «De lo que se trata es de que los diagnósticos conduzcan a un tratamiento más curativo, y eso, en cáncer de mama, se consigue con un diagnóstico precoz»; la recomendación es, por lo tanto, acudir a consulta ante cualquier nódulo sospechoso que no desaparece en unos días.
Y pese a que se considera una patología de ámbito femenino, los hombres también pueden verse afectados por ella, aunque la prevalencia es solo de entre el uno y dos por ciento de los casos. No obstante, nuevamente, la detección precoz es fundamental, «no solo para curarlo, sino para derivar su caso a la Unidad de Consejo Genético, puesto que es posible que si tienen hijas, sean portadoras del mismo gen que ha desencadenado el tumor en el paciente», advirtió.
En la mayoría de las mujeres afectadas no es posible identificar factores de riesgo específicos. Solo se conoce que los antecedentes familiares multiplican las probabilidades por dos. Sin embargo, esas mutaciones son raras y explican únicamente una pequeña parte de la carga total de cáncer mamario.
EL FUTURO. Los conocimientos actuales sobre las causas del cáncer de esta enfermedad, lo que sí se sabe es que «cada vez somos más capaces de clasificar mejor a cada paciente, por eso el abordaje de la dolencia debe ser multidisciplinario, con equipos formados por médicos de distintas especialidades, que seleccionen el tratamiento más adaptado a cada perfil», señaló el facultativo. «Esto es lo que sin duda aumentará sus probabilidades de curación»; además de la posibilidad de dedicar a cada afectado, teniendo en cuenta su perfil, un tratamiento personalizado, y cirugías menos invasivas. «Lo que vamos a investigar, en los próximos años, es la terapia individual lo que significa una búsqueda del mejor tratamiento posible a cada enfermo, de modo que conseguiremos la curación con la menor tasa de secuelas», afirmó el jefe del Servicio de Oncología Médica de MD Anderson Cancer Center Madrid.
Por otra parte, se conoció que, actualmente, en España se reconstruyen las mamas solo el 30 por ciento de las españolas operadas de mastectomía, y que, de ellas, únicamente el 40 por ciento lo hace de forma inmediata, según confirmó la Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética que reclamó, para todas las mujeres que vayan a ser sometidas a una intervención de estas características, que se valore su reconstrucción y que, de prescribirse, se realice, a ser posible, en la misma operación.