El sábado 27 de junio de 2015 pasará a la historia como el día en el que se inauguró Coliseum Burgos. La primera corrida de abono de la feria taurina de las Fiestas de San Pedro y San Pablo 2015 permitió a miles de personas disfrutar de una tarde de toros de la ganadería burgalesa de Antonio Bañuelos con la presencia de los espadas: Enrique Ponce, El Juli y Alejandro Talavante.
Cuando el nuevo reloj de Coliseum Burgos dió las 18.30 horas comenzó un festejo taurino muy especial. Así lo estimaron decenas de asistentes que apreciaron un cambio en la antigua plaza al incorporar cómodas butacas y decir adiós al sol, y también a la sombra. También los matadores miraron sorprendidos al saltar a la arena la cúpula que preside desde hoy las nueve corridas de abono de esta feria.
Ponce fue el encargado de iniciar la lidia del primer astado de la Cabañuela. Un toro castaño de 440 kilos que brindó al público con una gran ovación. Ponce deslumbró con su toreo clásico y sus más que valientes pases de pecho. El toro, manso y descastado, permitió al valenciano ejecutar una faena que le sirvió la ovación y los aplausos de un repleto Coliseum. En la suerte, Ponce mató al astado con una estocada casi plena previa de un pinchazo.
La tarde fue favorable para el Juli,con una oreja de su primero de la tarde y para Talavante, dos orejas del primero. Menos suerte tuvo Enrique Ponce que tras no poder hacer nada con el cuarto de la tarde se vio relegado a salir con la cabeza gacha por la Puerta de Arrastre.La Puerta Grande, una de las novedades del nuevo espacio, se abrió para Talavante que salió a hombros ante los vítores y aplausos de los aficionados.
Autoridades y asistentes
El alcalde de Burgos, Javier Lacalle, acompañado del presidente de la Diputación de Burgos, César Rico, y el jefe superior de Policía Nacional de Burgos, Javier Peña. Entre otras caras, en el callejón pudo verse al crítico taurino Manolo Molés, así como a los procudaradores electos Ángel Ibáñez y Virginia Arnáiz. Asimismo, estuvieron presentes el matador Jaime Ostos y su esposa.
En el graderío lleno total y una animación continuada de la mano de las peñas y casas regionales que ocuparon la parte superior del espacio.
Nuevo concepto
Coliseum Burgos es un espacio multiusos con una capacidad cercana a los diez mil asistentes. En el
caso de espectáculos taurinos,el aforo es de 8.550 plazas,mientras que para el resto de actividades se sumarán las 900 que ahora ocupan el ruedo. De este modo, el aforo máximo en el caso de próximas competiciones deportivas sería de 9.454 localidades utilizando los dos anillos de grada.
La reforma integral que ha dado luz verde a Coliseum Burgos ha contado con un presupuesto de 5,5 millones de euros. Un montante que ha permitido adaptar el espacio a las personas con discapacidad al eliminar barreras arquitectónicas y sumar un ascensor junto a la puerta principal. Asimismo, y por primera vez en su historia, los triunfadores de la tarde podrán salir por la Puerta Grande. Algo insólito hasta la fecha.
La inauguración del Coliseum Burgos cierra una etapa de la tradición taurina de la ciudad y pone punto y final al ya histórico coso de El Plantío. Una plaza por la que han pasado los mejores espadas de la reciente historia de la tauromaquia, inaugurada por los espadas Jaime Ostos,Manuel Benítez ‘El Cordobés’ y José Manuel Inchausti ‘Tinín’ en el año 1967,un 28 de junio.Cuarenta y ocho años después, los toros han vuelto a hacer presencia. Esta vez en un espacio versátil y polivalente en el que, además de pases de pecho se podrá disfrutar de eventos deportivos o musicales, entre otros.
REVENTAS
Del interés suscitado por esta primera corrida puede dar fe también la Policía Local, que ayer por la tarde interceptó a 4 reventas en los alrededores de la plaza de toros. Los agentes les requisaron numerosos boletos y dinero en metálico, según informa en su cuenta de Twitter (@PoliciadeBurgos).