La Guardia Civil ha detenido en Burgos a D.G.A. (44 años), F.J.G.A. (55) e investigado a J.C.M.G. (62) como presuntos autores, en distinto grado de autoría, de los delitos contra los Recursos Naturales y el Medio Ambiente y contra la Salud Pública.
Los hechos investigados se vienen desarrollando desde el pasado mes de agosto, cuando una Patrulla del SEPRONA detectó, en una localidad de La Bureba, lo que aparentemente parecían ser unos trabajos de demolición de unas viejas naves. El hecho de que los tejados estuvieran construidos con placas de fibrocemento, conocidas comúnmente como uralita, llamó la atención de los agentes.
Como para la gestión y eliminación de este residuo -ya desaparecido del mercado-, se necesita un permiso adecuado ya que en su proceso de fabricación se usaba de manera habitual y principalmente el amianto (componente este de alto riesgo para el Medio Ambiente y la salud de las personas), la patrulla comprobó la legalidad de las obras observadas.
2 detenidos por demoler viejas naves con placas con amiantoLa inspección ocular practicada en el lugar destapó numerosas irregularidades, como por ejemplo que los operarios allí presentes carecían de Equipos de Protección Individual (EPI) contra los riesgos derivados de la exposición al amianto durante el trabajo o que se esparcía el escombro mezclado con las placas de fibrocemento para la realización de soleras en el lugar.
La demolición carecía también del correspondiente permiso así como del preceptivo plan de retirada y tratamiento posterior del amianto, 2.035 m2 de placas de fibrocemento; además parte de los vertidos resultantes habían acabado en un arroyo cercano con la consiguiente destrucción de vegetación y del arbolado existente, con ejemplares centenarios.
Se estima en 6.820 m3 el volumen de escombro obtenido, mezcla del material de obra y del fibrocemento, del que se tomaron entonces muestras; una vez analizadas por el Servicio de Criminalística del Cuerpo se ha determinado la presencia de amianto en su composición.
A pesar de las insistencias tanto del SEPRONA como de la Oficina Territorial de Trabajo de la Junta de Castilla y León y la Inspección Provincial de Trabajo y Seguridad Social de Burgos, para que se detuviera la demolición, las pesquisas practicadas han demostrado que los responsables hicieron caso omiso y la obra nunca se paró.
Los investigadores consideran que se ha puesto en peligro el Medio Ambiente y la salud de las personas al existir un serio riesgo por la posible presencia de partículas de amianto en suspensión diseminadas por el aire y por la destrucción de la vegetación de ribera de un arroyo por el vertido incontrolado.
Cabe destacar que se ha detectado el almacenaje de semilla perteneciente a la cosecha de esta temporada en una nave aledaña, así como la reciente siembra de cereal en terreno contaminado.
Las diligencias instruidas han sido entregadas en el Juzgado de Instrucción de Briviesca y Fiscalía de Medio Ambiente.
La investigación ha corrido a cargo de la Sección del SEPRONA de la Comandancia de Burgos y ha contado con la colaboración del SEPRONA de Cantabria, la Inspección Provincial de Trabajo y Seguridad Social de Burgos, la Oficina Territorial de Trabajo y el Servicio Territorial de Medio Ambiente ambos de la Junta de Castilla y León.