El secretario general de Agricultura y Alimentación, Fernando Miranda, y el presidente de la Interprofesional Láctea (INLAC), Ignacio Elola Zaragüeta, han suscrito hace unos días en la sede del Ministerio un convenio de colaboración con el objetivo de aunar esfuerzos para mejorar la cadena de valor del sector lácteo en cuestiones prioritarias como avanzar en aspectos relacionados con la contratación, en la cohesión intersectorial, en la monitorización y la transparencia del mercado y en actividades de promoción del consumo de leche y productos lácteos.
Este convenio se suscribe como continuación de los cuatro firmados anteriormente en los años 2011, 2013, 2015 y 2019, con lo que se dota de continuidad temporal a la estrecha relación entre el ministerio y la Interprofesional Láctea, que ha quedado patente en los últimos años en relación con la cohesión intersectorial, la promoción e información de la leche y los productos lácteos, y la sostenibilidad del sector.
Entre los compromisos adquiridos en el convenio se encuentra el desarrollo de actividades de promoción del sector, al objeto de difundir y promover las bondades de la leche y los productos lácteos entre los consumidores. Igualmente, ambos organismos se comprometen a impulsar acciones que pongan en relieve la sostenibilidad ambiental, social y económica del sector, así como acciones que valoricen sus esfuerzos por el bienestar animal.
Por otro lado, también se comprometen a promocionar y participar en encuentros con los eslabones de la cadena alimentaria que no estén representados en INLAC, así como llegar a acuerdos y desarrollar iniciativas que aseguren un correcto funcionamiento de la cadena láctea. En éste ámbito, el papel de la Interprofesional es crucial al mantener el esfuerzo por poner a disposición del sector los medios que faciliten la utilización de índices para la determinación del precio en los contratos, en particular en los de larga duración. De igual forma, las partes se comprometen a identificar las líneas prioritarias de investigación, desarrollo e innovación en el sector lácteo.
Con la suscripción de este acuerdo se potencia el papel de INLAC como órgano para la consecución de acuerdos sectoriales, a la vez que permite sumar esfuerzos que revertirán en beneficio del sector. No en vano, esta interprofesional agrupa tanto a productores (ganaderos) como a la industria transformadora (cooperativas e industrias). Como representantes de la rama de la producción participan las organizaciones profesionales agrarias ASAJA, COAG, UPA y Cooperativas Agro-alimentarias; y como representantes de la rama transformadora participan las asociaciones Fenil y Cooperativas Agro-alimentarias. Supone un importante instrumento vertebrador del sector lácteo cuya misión es representar los intereses comunes de la cadena del sector lácteo de vaca, oveja y cabra mediante el diseño, el acuerdo y la implantación de medidas vinculantes dirigidas hacia su vertebración y estabilidad sectorial.
Apoyo a los productores cárnicos de vacuno, ovino y caprino.
El Consejo de Ministros ha aprobado este martes, a propuesta del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, un real decreto por el que se regula el reconocimiento de las organizaciones de productores y sus asociaciones de los sectores ganaderos de carne de vacuno, y de carne de ovino, y se establecen las condiciones para la negociación contractual por parte de estas organizaciones y sus asociaciones.
En concreto, esta norma permite reforzar la posición negociadora de los productores de carne de vacuno, ovino y caprino y lograr así una mayor retribución al sector ganadero y un mejor reparto del valor a lo largo de la cadena alimentaria, enmarcado en la normativa comunitaria y de la libre competencia en el mercado. Agricultura ha recalcado que con esta iniciativa continúa con su «decidido apoyo» a la constitución de organizaciones de productores en el sector agrario.
Así, la reforma de la Política Agraria Común (PAC), que entrará en vigor en 2023, reconoce el «papel fundamental» de las organizaciones de productores en la concentración de la oferta y en la mejora de la comercialización y planificación de la producción, así como en la adaptación de la producción a la demanda, la optimización de los costes de producción y la estabilización de los precios al productor.
Por ello, las incluye como estructuras clave para mejorar la posición del sector primario en la cadena, contribuyendo de esta forma a cumplir con los objetivos de esta política comunitaria.
Así, las recomendaciones realizadas por la Comisión Europea a España en diciembre de 2020, en el marco de la estrategia 'De la Granja a la mesa', y que se han tenido en cuenta en la elaboración del Plan Estratégico nacional para la aplicación de la PAC, incluyen el desarrollo legislativo para el reconocimiento de organizaciones de productores en aquellos sectores que aún no cuentan con normativa a este respecto.