El instituto Castella Vetula y el Conde Sancho García han unido sus caminos y se han convertido este curso en socios del mismo proyecto Erasmus que lidera el centro medinés y que volverá a estrechar lazos con los alumnos de su homólogo alemán, el Hariolf Gymnasium. Los tres socios, coordinados por el instituto medinés trabajarán durante éste curso y el próximo en una interesante iniciativa bautizada ‘De vuelta a un futuro verde y rural’, que tratará de hacer ver a los alumnos implicados que en el medio rural hay futuro y, si es sostenible y respetuoso con el medio ambiente, muchísimo mejor.
En Castilla y León, solo 10 centros, tres de ellos burgaleses, coordinan este tipo de intercambios escolares Erasmus, mientras en el conjunto del país se suben al carro de la internacionalización casi 200 centros coordinadores y 659 que hacen las veces de socios, como es el caso del Conde Sancho García. Cuantos más socios, más posibilidades de éxito se dan, por lo que Medina no lo dudó a la hora de tocar al IESO espinosiego y mantener el intercambio que durante ocho cursos, seis de ellos subvencionados con Erasmus, ha mantenido con uno de los institutos de la ciudad alemana de Ellwangen.
Gracias a los sucesivos proyectos desarrollados con el centro alemán, dos de ellos entorno al mundo empresarial, y uno más enmarcado en el ámbito del turismo, el patrimonio y las nuevas tecnologías, una veintena de alumnos de cuarto de la ESOdel Castella Vetula ha viajado cada año durante ocho cursos a Alemania y los alumnos del Hariolf Gymnasium han conocido Medina y Las Merindades. El último viaje tuvo lugar el pasado mes de marzo. Los alumnos de Medina regresaron de Alemania el día 10 tras una semana de estancia y el 14 se declaró el estado de alarma que truncó el viaje de los chicos alemanes. Este curso, esperan que la pandemia les de tregua para que 15 alumnos de Medina y 5 de Espinosa viajen a Ellwangen. Se seleccionan en función de su interés, sus calificaciones y su nivel de inglés, básico para participar en esta iniciativa.
Antes del éxodo y ahora. El proyecto con el que trabajarán fue ideado en Medina y planteará a los alumnos estudiar el mundo rural, investigar su entorno y conocer sus tradiciones agrícolas y ganaderas. Medina de Pomar, como señalan los profesores que han preparado el proyecto, Celestino Martín y Laura Saiz junto con el director del Castella Vetula, Juan Ángel de la Torre, cuenta con importantes explotaciones agrícolas y hortícolas, mientras que en Espinosa predomina la tradición ganadera y pasiega, por lo que vieron «muy interesante trabajar juntos».
Alumnos de los dos centros, medinés y alemán, en la ciudad anfitriona. - Foto: DBLa etnografía, las costumbres de antaño, cómo se vivía en Medina de Pomar y su entorno hace más de medio siglo, antes del éxodo rural a las ciudades, será la tarea que desarrollarán en el Castella Vetula en este primer curso de Erasmus. El próximo se empaparán del European Green Deal, el Acuerdo Verde Europeo, que busca neutralizar los efectos de Europa sobre el clima antes de 2050, así como sobre la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible. Asimismo, habrán de investigar y buscar empresas y explotaciones que respeten esos preceptos para mostrárselas a sus compañeros de Alemania. «Queremos que los chicos investiguen, que vean lo positivo del mundo rural y luchar contra los estereotipos», señalan los docentes. Que conozcan las inversiones que se realizan en el medio rural o la tecnología en el campo es otra de las finalidades del proyecto.
En Espinosa de los Monteros, como explica Alejandra Panizo, ya han comenzado con un trabajo sobre como convencer a otros de quedarse a vivir en Espinosa, en su tierra, un propósito en el que están de acuerdo la mayoría de los padres de los alumnos. Deberán elaborar un video y un póster, en los que pondrán en valor los monumentos de la villa, su comercio local y de proximidad, sus recursos naturales o su turismo rural, así como su sector primario. Será un primer paso para el proyecto final.
Mientras, desde el IESCastella Vetula siguen deseando que el Ayuntamiento medinés se plantee un hermanamiento con la ciudad de Ellwangen, como le propusieron el pasado curso. «Sería un buen gesto para favorecer futuras relaciones, que podrían ser laborales, turísticas o educativas». «Siempre es bueno ir fuera para ver que hacen otros», destaca el equipo de Castella Vetula, que acumula ya una sólida experiencia en internacionalización.