El comité de empresa de la Cooperativa Avícola y la nueva gerencia, que lleva operando desde diciembre, siguen acercando posturas, y el viernes sellaron el acuerdo para que los cerca de 80 trabajadores que tiene en plantilla Cobur -desde la fábrica de pienso hasta las tiendas y delegaciones, pasando por la incubadora o los repartidores- se garanticen el cobro de la nómina de enero.

La acuciante deuda que arrastra la compañía, especialmente con proveedores, provocó el cierre del matadero, por lo que una de las máximas que pusieron sobre la mesa los representantes sindicales fue la de asegurarse la retribución mensual a final de mes.
Aunque ambas partes se felicitaron por el acuerdo alcanzado, los sindicatos exigieron al gerente el pago de la extra de Navidad, que lleva pendiente desde finales de diciembre, cuestión que tratarán está semana. "Esperemos que vengan (por la gerencia) con algún compromiso cierto. Si no propondremos hacer un conflicto colectivo con una convocatoria de huelga, previo paso por una mediación", apuntaron fuentes de UGT. 

Desde la gerencia indicaron a este periódico que "no habrá problemas o inconvenientes" en que se tramite el cobro, a pesar del aplazamiento que se realizó. Mientras tanto, continúan trabajando para tratar de encauzar un proyecto de viabilidad que dote de cierta tranquilidad a la compañía.

La semana pasada se reunieron con diferentes administraciones, mientras que en los próximos días harán lo propio con distintas entidades de crédito. "Hay que salvar la Cooperativa y dotarla de estabilidad a largo plazo", apuntan desde la gerencia, concretando que las distintas conversaciones que están teniendo ahora mismo podría dar sus frutos "próximamente".