Las herencias suelen ocasionar disputas entre los familiares, pero las últimas voluntades de Sixto Gómez Abad, quien fuera alcalde Castrillo de la Reina entre 1983 y 1991, han molestado tanto a uno de sus sobrinos que no dudó en contratar una pala excavadora en Cascajares de la Sierra y un conductor, éste en el mismo Castrillo, para demoler el chalé que su tío decidió legar a la localidad, junto a un prado de unos 2.000 metros cuadrados en el centro del pueblo y una colección de 150 libros.
La herencia de Sixto Abad suscitó malestar desde un primer momento en este familiar que, según indica el alcalde, Galo Contreras, se dirigió al Ayuntamiento para que no aceptara la herencia de su tío, «pero nosotros le dijimos que tenía la posibilidad de impugnar el testamento, ya que aunque el municipio renunciara al legado éste no necesariamente acabaría en manos de los familiares porque esa no era la voluntad del fallecido».
El veintidós de marzo, la corporación municipal acordó aceptar los bienes legados por Sixto Abad al municipio, ya que otros que tenía en Burgos capital los legó a otro sobrino. Aunque los corporativos y algunos vecinos conocían el malestar de algún familiar por las últimas voluntades del ex alcalde lo que no se podían imaginar es que el jueves, a las cuatro de la tarde, una pala excavadora iba a derribar el chalé. «Estaba en casa y me avisó la secretaria municipal para decirme que estaban tirando la vivienda», recuerda el alcalde, quien al llegar preguntó al operario de la máquina que quién le había mandado demoler la casa, «y el sobrino de Sixto Gómez Abad me dijo que él».
El alcalde no comprende «cómo una persona sin licencia de obra manda una excavadora a derribar una casa que no es de su propiedad» y tampoco es comprensible que el conductor de la máquina acometiera un trabajo como ese sin comprobar quien era el propietario de la vivienda o si tenía autorización para derribarla.
Nada más conocer los hechos, el alcalde puso en conocimiento de la Guardia Civil de Salas los hechos y en breve formalizará la denuncia en la que reclamarán daños y perjuicios por demoler la mitad de chalé, sobre cuyo futuro no se quiso manifestar el alcalde, quien prefiere esperar a ver como acabe el asunto antes de decidir qué hace con la vivienda.
Muy querido en el pueblo
Sixto Gómez, natural de Castrillo y soltero, falleció en Burgos capital y era un hombre muy querido por los vecinos que le recuerdan por muchas cosas que hizo cuando era alcalde, como por ejemplo el edificio de las escuelas. También se le recuerda porque a finales de los sesenta organizaba equipos de fútbol femenino y carreras de motocross... y a partir de ahora también le recordarán por su polémica herencia.