Una vez más, las distintas formaciones políticas se meten en harina para recabar el apoyo de los ciudadanos de cara a componer el menú municipal de los próximos cuatro años. El tiempo dirá si las propuestas acaban materializándose en un plato vistoso, apetecible y, sobre todo, nutritivo para el futuro desarrollo de Aranda de Duero. Tras semanas, incluso meses, dedicados a la composición de sus listas y elaboración de programas, desde hoy toca desgranar los ingredientes de sus propuestas, en actos grandes o en el contacto diario con los votantes arandinos, sin perder de vista la cocina electoral y el servicio a los ciudadanos.
El próximo 28 de mayo, en los colegios electorales de Aranda habrá seis papeletas entre las que elegir, tres encabezadas por más o menos repetidores como alcaldables y otras tres con caras nuevas. Todos, los seis, se mostraron muy dispuestos a aceptar la propuesta de Diario de Burgos para participar en un reportaje fotográfico conjunto. Las complicaciones de las respectivas agendas obligaron a hacer casi malabarismos para reunirles a todos, pero la buena voluntad primó sobre lo apretado de las horas.
Los candidatos a la Alcaldía de Aranda de Duero mostraron su sorpresa ante el escenario escogido para estas fotos electorales. Gracias a la disposición del Grupo Tudanca, con su gerente Javier Yagüe a la cabeza, que ofreció todo tipo de facilidades, y a la variedad de servicios que ofrece en su complejo arandino, se pudo variar de fondo y meter a los seis cabeza de lista, nunca mejor dicho, hasta la cocina.
El más tempranero fue el candidato de Vox, Sergio Chagartegui, con su cazadora motera en ristre, que aprovechó para tomarse un café. Pocos minutos después, antes de la hora fijada, llegó la popular Raquel González, planteándose si la elección cromática de su ropa era la adecuada. «Por si acaso, tengo opciones para cambiarme en el coche», reconoció. Algo que no fue necesario porque el negro se ajustó bien a todos los fondos utilizados. El resto de prendas escogidas por los cabeza de lista no trajeron sorpresa alguna: Unanimidad de americanas en Ildefonso Sanz (PSOE), Andrés Gonzalo (Podemos-IU), José Antonio Fuertes (Cs) y Antonio Linaje (Sentir Aranda). Eso sí, ninguno optó por los colores propios de sus formaciones políticas, el más atrevido fue Fuertes con su comentado, para bien, rosa sobre camisa blanca.
El retraso, de no más de diez minutos, de la mitad de los citados provocó intranquilidad en los tres más que puntuales, haciendo que el ambiente se tensara un poco. La espera, en la entrada del complejo, con un ir y venir de clientes, sirvió para asistir a una situación inédita: nunca antes habían coincidido los seis candidatos, llegando algunos a saludarse en persona por primera vez. Aunque primaba la diplomacia y la buena disposición, ese desconocimiento mutuo sumó un poco más de tensión.
Eso sí, fue comenzar la sesión y todo fueron sonrisas y buen rollo, no sabemos si real o fingido o si se mantendrá estas dos semanas largas. Los seis hicieron gala de kilos de naturalidad, como si eso de ponerse delante de una cámara fuese parte de su labor en los asuntos municipales arandinos. Eso sí, cuando el fotógrafo, Alberto Rodrigo, les apuntaba con su cámara se acababan las conversaciones porque, ya se sabe, el que se mueve no sale, al menos bien, en la foto (...).
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