La propia consejera delegada delGrupoNicolás Correa, CarmenPinto, reconoció este jueves que 2020 está siendo un año«complejo».Su presidente, José Ignacio Nicolás Correa, enumeró las numerosas «dificultades» con las que la compañía burgalesa, dedicada a la fabricación de fresadoras, ha tenido que lidiar para sobrellevar la situación sanitaria y económica durante los últimos meses.
Sin embargo, y pese a las enormes restricciones e impedimentos que se han puesto por delante, la compañía ya ha recuperado el ritmo de facturación previo tras el «impacto inicial» de abril. Además, las diferentes plantas que conforman el grupo trabajan «casi» con normalidad desde el punto de vista productivo.Todo ello se traduce en una cartera de pedidos un 23% superior a 31 de agosto a la del año pasado por estas fechas, así como una cifra de negocio consolidada de 33,1 millones de euros.Así lo detalló el presidente de la compañía durante la celebración de la Junta General de Accionistas, meses después de las fechas en las que estaba prevista y combinando el formato presencial y el telemático.
La consejera delegada,CarmenPinto, recordó que la compañía decidió traer de vuelta de sus distintas sedes en el mundo a todos los empleados, aunque desde hace ya 2 meses las visitas han vuelto a realizarse. «Hemos tenido algo de ventaja al vivirlo (la pandemia y sus consecuencias) enChina antes que enEuropa, por lo que estábamos preparados», indicó.
Cierre de 2019. El encuentro celebrado este jueves en la sede central delGrupoNicolásCorrea sirvió para presentar -y aprobar- las cuentas correspondientes al ejercicio 2019, con una cifra de negocio de 74 millones de euros, una Ebitda de 9,7 millones, unos beneficios antes de impuestos de 8 millones (un aumento del 12%) y una deuda financiera neta consolidada de -3,8 millones, una subida del 332,2% sobre 2018.«Desde 2017 hemos realizado inversiones por valor de 7,1 millones de euros, hemos pagado dividendos y mejorado la situación de deuda financiera de una manera tan espectacular hasta los -5,1 millones», aseguró el presidente del Grupo, José Ignacio Nicolás Correa.
Dadas las condiciones y exigencias sanitarias, la Junta General de Accionistas, que anualmente suele reunir a decenas de inversores en la compañía para conocer de primera mano el devenir de la mercantil, apenas contó con la presencia de tres. El acto se celebró en una sala con una veintena de sillas, separadas por más de metro y medio, y con el uso obligatorio de mascarilla. Además, buenas parte del consejo de administración siguió la sesión desde sus domicilios. «Hay que agradecer el inmenso trabajo que el equipo directivo y los trabajadores han hecho durante este tiempo», arrancóel presidente.