Javier Álvarez de los Mozos no se sentará en el banquillo de la Arandina la próxima temporada. La entidad ribereña y el preparador burgalés han llegado a un acuerdo de resolución del contrato. El técnico recibirá una indemnización económica en razón del año de contrato que le quedaba aún pendiente al frente del banquillo blanquiazul.

Las negociaciones, llenas de tiras y aflojas entre ambos bandos, han permitido finalmente finiquitar la tensa situación que vivían directiva y míster las últimas semanas tras la eliminación del equipo ribereño en La Nucía. La decisión corta por lo sano unas relaciones bastante deterioradas en los últimos meses de competición y que habían viciado el ambiente interno del club a niveles insostenibles.

De este modo, según ha podido saber DB, la Arandina ya se ha puesto manos a la obra en busca de un nuevo entrenador para la próxima campaña. El club, interpelado por la nueva situación en que quedará el club y los proyectos de futuro, declinó hacer comentarios, también sobre las razones que han pesado en la rescisión de contrato. Lo que sí se sabe es que la dirección deportiva ya está trabajando en diseñar un nuevo poryecto de cara a 2020.

Con la salida de Javier Álvarez de los Mozos, la Arandina deja atrás una ‘era’ de dos campaña de gran nivel competitivo, pero también un tiempo en el que ha habido momentos controvertidos del técnico, que han llevado a permanecer una veintena de partidos lejos de los terrenos de juego por varias sanciones.

En lo puramente deportivo, a pesar de que en ninguna de las dos temporadas se haya conseguido el ascenso a Segunda B, sí quedarán para la historia del club sus logros a nivel de puntuación (77 y 83 puntos respectivamente). Guarismos notables que, a la postre, han elevado al míster al podio de técnicos con más puntos como blanquiazul.