Integrante del equipo que devolvió al Racing de Santander a Segunda el pasado verano, Javi Soria es uno de los jugadores más queridos por la afición cántabra. Aunque ha tenido ofertas para irse en el mercado de invierno, y pese a que le ha tocado vivir una de las etapas más convulsas de la historia del club, ha decidido continuar hasta final de temporada.
Su pasado rojillo y sus años en el Guadalajara a las órdenes de Carlos Terrazas, le convierten en una referencia para su equipo de cara a la trascendental cita del sábado.
Quedan muy pocos compañeros de su etapa en el Mirandés pero seguro que estos días hará alguna llamada de teléfono.
Hablo de vez en cuando con Caneda y Corral, y recordamos algunas cosas de mi época en Miranda, que además fue muy bonita. Pasé un gran año en el Mirandés y siempre es especial regresar a Anduva.
Estuvo en el club el año del debut en Segunda. Las cosas han cambiado mucho desde entonces, ¿le sorprende el presente rojillo?
Nadie hubiera apostado que el Mirandés iba a estar tan bien clasificado a estas alturas, pero han pasado las jornadas, se ha hecho fuerte, y ahora es un serio aspirante a estar arriba.
¿La confianza es uno de los factores más importantes en el fútbol?
Desde luego, porque cuando las cosas te salen y te ves arriba, la motivación es mayor. Pero para estar ahí tienes que tener más cualidades que la confianza.
¿Cuáles son las del Mirandés?
Sobre todo el ritmo y la intensidad que imprime siempre a los partidos.
Las estadísticas reflejan que Mirandés y Racing son más parecidos de lo que dicta la clasificación.
Somos dos equipos que encajamos pocos goles pero a los que nos cuesta hacerlos. Creo que se verá un partido de muchas idas y vueltas, con un ritmo alto, y el equipo que logre adelantarse tendrá mucho ganado.
¿Sufrirá el Racing hasta final de temporada?
Esperemos que no, pero estamos cometiendo muchos errores y si no los corregimos pronto, lo vamos a pagar porque en esta categoría nadie te perdona.
¿Qué le falta al equipo para escapar del descenso?
Goles. Defensivamente no tenemos malos números pero nos cuesta ver puerta. Si cambia un poco esa suerte de cara a la portería contraria, porque en más de un encuentro hemos merecido más, nos veremos rápidamente en otra situación.
¿La incertidumbre institucional les está pasando factura?
Aunque no quieras, es inevitable estar pendiente de lo que sucede fuera del terreno de juego. No vivimos una situación cómoda, pero tenemos que tratar de aislarnos porque nuestra posición en la clasificación no permite distraerse mucho, y tenemos que tener claro que si nos mantenemos en Segunda, las cosas van a cambiar y todo mejorará.
Saber que el futuro del club depende de la permanencia, ¿supone una presión añadida que puede atenazar?
Llevo dos años en Santander y tengo claro que la estabilidad de la entidad está muy ligada a los resultados deportivos. El Racing no atraviesa por un buen momento económicamente y bajar agravaría los problemas.
En las últimas semanas se ha especulado con su posible salida debido al interés de clubes como la Ponferradina.
Sí, hemos hablado, pero tengo contrato y el míster cuenta conmigo por lo que mi idea es continuar en Santander y contribuir a la permanencia.