Recuperar de las sombras un pueblo fantasma en la Bureba y crear en sus alrededores un bosque comestible es el sueño de Maaike Geurts y Tibor Strausz. La historia puede sonar irreal, pero cuando uno pone un pie en Bárcena y se topa con más seres humanos que en cualquiera de los pueblos de la zona, gana credibilidad. Su proyecto medioambiental no solo ha captado la atención de turistas, medios de comunicación locales y nacionales, y  algunos europeos se las han visto y deseado para conseguir unas declaraciones de la pareja. 

Marc y Óscar no estuvieron al tanto del torbellino mediático que generó la compra de la aldea hasta hace apenas un mes. Fascinados con la idea y tras documentarse hasta el punto de localizar a los protagonistas «gracias a Diario de Burgos», comentan, esta semana emprendieron un  largo viaje desde su Barcelona natal para conocerlos en persona y presentar su estilo de vida en Monxileros, su canal de YouTube. 

Comparten la pasión por explorar lugares peculiares y conocer a sus gentes, y las ganas por impulsar diferentes puntos de la España vaciada les llevó hace menos de un año a desarrollar «más en serio» sus trabajos audiovisuales. Todavía no viven de ellos y por el momento únicamente logran financiarse los desplazamientos. Todo llegará. Cuentan con 20.000 seguidores en la plataforma y con otros miles en Instagram y TikTok, aunque esperan que la cercanía con la que los holandeses les han abierto las puertas de su casa -mejor dicho de su pueblo- conquiste a un número mayor.

Monxileros se adentra en Bárcena de Bureba y muestra en YouTube la vida de la familia holandesa propietaria de la localidad burgalesa. - Foto: Patricia

Conocimos la existencia de la aldea gracias a Diario de Burgos y publicaremos el documental el 9 de septiembre"

Marc Félez, youtuber

El rodaje estaba previsto realizarlo en una jornada, sin importar el número de horas invertidas, y así fue. Con un desvío imprevisto de por medio por culpa del GPS, la grabación se alargó hasta las 10 de la noche con la compañía final de la superluna. Además de la pareja y sus hijas, las pequeñas Trisa y Riva, los abuelos maternos, Han y Gerard, y su perro, también protagonizan alguna de las secuelas del documental, que se estrenará el 9 de septiembre en el canal. 

Con su equipo audiovisual han logrado captar los testimonios de unas personas cuyo principal objetivo es aportar lo que esté en sus manos para «mejorar la calidad de vida en el planeta y cuidar de la Tierra». Con un micrófono de corbata sujeto en una chaqueta verde y con una de las niñas encima de sus piernas, Maaike se enfrentó sin titubear a varios objetivos. Con total tranquilidad -como si estuviera acostumbrada a los focos- describió su proyecto más personal. Después, llegó el turno del resto de los miembros de la familia. Carlos, el vecino inesperado que desde el mes de enero habita en una vivienda que él mismo ha rehabilitado, también aparece con discreción en algún plano. Los detalles de la 'decoración' de una casa semihabitada, que cuenta con una cocina (con horno, frigorífico, fogón y despensa), y un retrete seco, no pasaron desapercibidos entre los catalanes, y a lo largo de los «15 o 20 minutos» que pretenden que dure el vídeo, se apreciarán. La hora de la comida, la lectura o los trabajos en un tejado tendrán su espacio entre entrevista y entrevista.

Explorar lugares peculiares es nuestra pasión y aquí nos han ofrecido muchas facilidades para rodar"

Óscar Batallé, youtuber

Rodaje en equipo. Los youtubers abandonaron la pequeña localidad más que satisfechos. Las condiciones de grabación resultaron las ideales, y aunque soportaron a duras penas las altas temperaturas pudieron refugiarse de los rayos solares en el interior de las construcciones. La simpatía y el trato excepcional recibido por los anfitriones aceleró el trabajo planeado. 

La historia de Maaike Geurts y el resto de su familia, entrevistados en Bárcena de Bureba, protagoniza el nuevo proyecto audiovisual de los ‘youtubers’ catalanes. - Foto: Patricia

El siguiente paso a dar con las imágenes ya captadas es la selección de las mismas, priorizando aquellas que transmitan el estilo de vida elegido por los europeos. «La música es el 50% del vídeo y  muy importante, si no acompaña los usuarios los», declaran a este medio los jóvenes. El viaje «ha merecido la pena», añaden. Para el matrimonio, también. Mañana pondrán rumbo a Holanda tras disfrutar de unas semanas de desconexión y avanzar en la rehabilitación de su pueblo gracias al apoyo de voluntarios extranjeros y españoles que han acudido a Bárcena con la mejor de las intenciones. 

La aldea progresa. Las vacaciones estivales de Maaike Geurts y Tibor Strausz han variado significativamente respecto a las de otros años. Los viajes alrededor del mundo se acabaron y desde hace unos meses, el tiempo libre del que disponen lo invierten en rehabilitar la aldea que adquirieron por 350.000 euros. 

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En cuatro semanas han logrado poner en marcha la instalación eléctrica, de agua potable y una cocina, restaurar el tejado de una vivienda, despejar caminos y plantar más de cien árboles.