El Ayuntamiento de Miranda ya ha aprobado inicialmente el Presupuesto para este ejercicio y, en él, ha establecido una partida que supera los 45.000 euros para mejoras en el Castillo. El concejal de Cultura y Turismo, Carlos Diez, explica que «es la primera vez» que las cuentas municipales incluyen una inversión destinada a la propia fortaleza de la ciudad del Ebro, pues desde que se habilitó el recinto hace algo más de una década apenas se han realizado trabajos menores y han consistido en «pintar el CIMA, hacer un mural, arreglos puntuales en una ocasión en las barandillas, y algo de mantenimiento del jardín botánico».
Por tanto, Diez recuerda que hasta ahora no se había hecho una intervención como la que se pretende ejecutar este año. ¿Y en qué consiste la obra como tal? El concejal de IU-Podemos describe que, por una parte, «el arreglo del CIMA va a consistir principalmente en las barandillas del jardín botánico, porque hay algunas rotas o están mal y deben sustituirse, y otras necesitan mantenimiento, pintura, pulirlas o barnizarlas». En segundo lugar, explica que también se pretende mejorar «el camino que conduce hasta el Castillo».
El edil apunta que «la terraza que va al ascensor tiene un pavimento que se puso hace diez años y se ha levantado», a lo que añade que dentro de la fortaleza también está muy dañado el firme del «tramo por el que se anda desde la barbacana, que es la zona anterior al puente, hasta la explanada». Eso sí, el listado de necesidades que acumula este conjunto patrimonial de Miranda no termina ahí. Diez reconoce que, si se consigue ajustar el presupuesto, le gustaría sustituir algunas «piedras de las que se colocaron nuevas» en la fortaleza y añade que debería rehabilitarse la pared del jardín botánico situada frente al antiguo edificio de Servicios Sociales, puesto que «mantiene las terrazas» del CIMA y en la actualidad sufre un problema de «humedades».
Desde el punto de vista del concejal responsable, esta inversión «es importante» para el Ayuntamiento. De hecho, califica la intervención como «imprescindible». A modo de ejemplo, Diez comenta que «el camino en el que se va a actuar tiene unos baches preocupantes e incluso podría caerse alguien» y destaca que las obras van a consistir en «hacer lo mínimo, pero al menos van a permitir que lo mantengamos bien».
El proyecto definitivo todavía no está redactado, aunque el concejal espera que los servicios municipales puedan encargarse del diseño y reconoce que, a continuación, deberá contratarse la obra con una empresa externa. Por ese mismo motivo muestra cautela a la hora de valorar los plazos. Ahora bien, Diez sí adelanta que le «gustaría que estuviese para el verano y es lo que se va a intentar, pero no se puede asegurar».
Precisamente, el departamento de Turismo ya se ha embarcado en la preparación de los Viernes del Castillo, que año tras año llenan la fortaleza con centenares de personas gracias a sus conciertos.Sobre ello, Diez adelanta que se tiene previsto programar «como mínimo seis actuaciones». Sin embargo, recalca que «no está cerrado» y todavía deben cuadrarse las fechas con los grupos seleccionados.