Castilla y León echa el cierre. Desde esta medianoche y durante los próximos 14 días, la hostelería baja la persiana y solo podrán estar abiertos los restaurantes y cafeterías de los lugares de trabajo y los establecimientos que ofrezcan comida a domicilio o servicio de recogida. También permanecerán cerrados este tiempo los gimnasios y los centros comerciales con una superficie superior a 2.500 m2, salvo minoristas que ofrezcan alimentos y productos de primera necesidad.
El nivel 4 de alerta sanitaria decretado en Castilla y León ha llevado a la Junta a tomar estas y otras "severas" restricciones que afectan no solo a la hostelería y la restauración, sino también al ocio y la cultura, al comercio y al ámbito social.
Quedan suspendidas las visitas a las residencias de mayores y las salidas de los internos de estos centros, salvo circunstancias excepcionales. Igualmente está prohibida la asistencia de público a actividades deportivas que no sean al aire libre.
Los aforos se reducen a un máximo del 33% en los museos, bibliotecas y salas de exposiciones, también en los cines, teatros y auditorios, mientras que en los lugares de culto el límite máximo es del 50%. A los velatorios no pueden asistir más de 15 personas si es al aire libre o 10 cuando se realicen en lugares cerrados.
Escapan de estas medidas excepcionales frente a la covid-19 establecidas en nuestro territorio las librerías, los quioscos de prensa, los estancos, las peluquerías, las tintorerías y lavanderías, y el pequeño comercio, es decir, establecimientos de menos de 2.500 metros cuadrados con acceso directo desde el exterior. Todos estos negocios podrán continuar abiertos.
A estas restricciones recogidas en el Bocyl del 4 de noviembre se une el toque de queda que limita la movilidad de las personas, salvo excepciones, entre las 22.00 y las 6.00 horas, y el cierre perimetral de Castilla y León, que restringe la entrada y salida en nuestro territorios excepto casos justificados.
Igualmente están restringidas a un máximo de seis personas las reuniones sociales y familiares, si bien desde la Junta, tanto el presidente, Alfonso Fernández Mañueco, como su número 2, Francisco Igea, y sobre todo la consejera de Sanidad, Verónica Casado, insisten en cada intervención pública que se limite el contacto social y se respeten las normas básicas frente a la covid-19. A saber: distancia interpersonal, mascarilla obligatoria, higiene constante de manos, ventilación de los espacios cerrados y responsabilidad individual o autoconfinamiento inteligente.