La Cofradía duplicará la carpa en San Juan y prevé dar cenas

ARSENIO BESGA / Miranda
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La entidad sanjuanera dará cabida a 4.000 personas en el solar situado frente al centro de salud Este. Se reunirá con las cuadrillas para diseñar las fiestas, pero no con los bares

La Cofradía de San Juan del Monte duplicará el aforo de la carpa de la alubiada y la habilitará también para cenas. - Foto: Ó.C.

Aún faltan siete meses para que Miranda vuelva a vibrar con las fiestas de San Juan del Monte, pero la Cofradía ya empieza a dar los primeros pasos para organizarlas. Entre los múltiples trámites que debe completar la junta directiva, el presidente, Roberto López de Davalillo, explica que han mantenido contactos con los proveedores para instalar de nuevo la carpa que este año albergó la alubiada y las comidas de varias cuadrillas. Según relata, habrá «novedades» dado que «muy posiblemente se doblará el aforo» para pasar de las 2.000 personas a las 4.000. Además, añade que en esta ocasión el recinto contará con «iluminación», de forma que también cenas se habilitará para cenas y evitará que algunos grupos busquen huecos en restaurantes de fuera de la ciudad.

Davalillo recuerda que en la edición de este año «se creó un ambiente muy bueno» y las cuadrillas le han transmitido que la idea «ha gustado». Por eso cree que resulta necesario mantener la carpa, así como, su ubicación. Y es que el presidente de la Cofradía cree que el solar situado entre el centro de salud Este y la Comisaría, «es la zona ideal, porque no está en pleno centro, pero tampoco está alejado, hay solo cuatro minutos andando».

El representante de la junta directiva, que está cerca de cumplir su primer año en el cargo, reconoce que antes de cerrar la contratación de la carpa deben «hablar con las cuadrillas para conocer el sitio del que disponen y lo que necesitan». De hecho, en breve iniciará las reuniones de la comisión específica que agrupa a las peñas, con el objetivo de que sean parte activa del diseño de las fiestas. En este sentido, Davalillo descarta reeditar los encuentros que tuvo con la hostelería y aclara que «la idea es hacer las fiestas de San Juan del Monte que tenemos en la cabeza», aunque reconoce que después de la celebración de junio tuvo «alguna conversación» con propietarios de bares por lo que guardan una buena relación. El presidente recalca que «son una parte muy importante, como otros sectores que se implican en las fiestas».

En cuanto al programa, Davalillo adelanta que «igual se hace alguna cosa diferente, pero seguirá la línea de este año» porque opina que «las cosas que salieron bien habrá que mantenerlas y las que no estuvieron tan bien habrá que darles una vuelta». Dentro del grupo de actos que fueron un éxito está el cambio del pregón al viernes, que seguirá en esa fecha, y también la batalla de charangas, sobre la cual relata que deben «intentar organizarla con tiempo para que se interprete el himno de San Juan, el de Miranda y el del Mirandés, y ver si se puede llegar a 40 cuadrillas».

El presidente tampoco se olvida de los elementos clásicos del plan festivo, como los ochotes. Es más, aboga por «darles el protagonismo que merecen, porque son grupos que ensayan muchas horas y deben tener esa importancia». Su idea pasa por mantener la actuación de estos colectivos, tanto infantiles como adultos, en la semana previa a la celebración principal, pero también desea que «salgan a la calle». Sobre esto, reconoce que este curso solo actuaron dos en un par de bares, por lo que en 2024 les gustaría «sumar alguno más».

A diferencia de lo que ocurrió en la última edición, cuando la junta directiva tomó las riendas con poco margen de maniobra, esta vez su presidente espera poder «potenciar las cosas que se quedaron en el tintero ahora que se tiene más tiempo». Por ejemplo, describe que «el sorteo del bombo, que consistía en subir a la balconada, no tuvo la visibilidad que nos hubiera gustado porque fue tan rápido que apenas pudimos a informar», algo que en 2024 pretende evitar.