En cuestión de una semana, a la Comisaría Provincial llegaron ocho denuncias por robos con extrema violencia de madrugada en la ciudad. Una brutalidad inusual que encendió la alerta en la Policía Judicial, que puso el foco en un grupo de chavales jóvenes que solían desplazarse desde Briviesca para cometer estos asaltos. En una inspección en la estación de autobuses, lograron identificarles y detenerles. El Juzgado de Instrucción 3 de Burgos, que les mandó a prisión, dirige una causa en la que existen «indicios racionales de criminalidad». Uno de los autos emitidos relata cómo actuaban estos delincuentes.

El primero de los hechos investigados se produjo el 19 de noviembre de 2023, a la altura del número 44 de la avenida Reyes Católicos. Uno de ellos abordó a un joven que caminaba solo sobre las 4 de la madrugada y, sin mediar palabra, le agarró del cuello al tiempo que le pedía todo lo que llevara encima. No tuvo ni tiempo de responder, pues mientras le registró sus pertenencias le propinó un fuerte golpe en el rostro. En todo momento estuvo acompañado de sus compinches. Se llevaron su tarjeta de crédito, con la que sacaron de un cajero 750 euros.

Minutos después, los ahora investigados fueron a por su segunda víctima, a la que vieron caminando hacia su casa en la calle Batalla de Villalar. Uno de los agresores le pidió un cigarro y otro le propinó, sin que siquiera pudiera defenderse, un puñetazo en la cara. La víctima consiguió zafarse y huir, pero el grupo le dio caza, le puso la zancadilla y una vez en el suelo le siguieron golpeando. Nuevamente, consiguió huir, pero a la altura de su portal le interceptaron y le robaron.

(Más información, en la edición impresa de este sábado de Diario de Burgos o aquí)