La Fundación Caja de Burgos ha presentado esta mañana un extenso y completo informe sobre el sector industrial en el área urbana de Burgos que concluye que la capital y sus alrededores "siguen ocupando" una posición de liderazgo en España en cuanto a la fortaleza de su sector secundario, pero al mismo tiempo pone de manifiesto unos retos que debe afrontar la capital para continuar en esa senda. Tal como ha señalado el director general de la institución, Rafael Barbero, uno de esos hándicaps que hay que salvar es el "alto precio del suelo" como freno a la atracción de nuevas empresas. Actualmente el precio medio oscila entre los 45 y los 80 euros por metro cuadrado, "muy por encima" de los valores medios de ciudades del entorno".
Asimismo, tanto el autor de informe, Gonzalo Andrés, como el propio Barbero, han hablado de la importancia de "dotar de contenido al parque tecnológico para atraer empresas intensivas en tecnología que puedan alimentar el ecosistema industrial". Existe "cierta tensión" sobre si se están dando los pasos para que lleguen empresas (hay que recordar que la obra finaliza en el último trimestre de 2025).
"Creemos que se están haciendo cosas, pero hay que ser ágiles", ha señalado Barbero. Asimismo, el director general de la Fundación ha advertido de que "hay que darse prisa también en desarrollar el CAE" dada la escasez de suelo en Burgos y animó al Ayuntamiento a contar con Caja de Burgos y otras instituciones privadas para trabajar en ese objetivo.