La Audiencia Provincial de Burgos condenó a E.T.T., una mujer de 35 años, a cinco meses de prisión por un delito de corrupción de menores tras encontrar la Policía Nacional casi 3.000 archivos de contenido pornográfico pedófilo en su ordenador. La pena fue acordada previamente con el Ministerio Fiscal, que en un principio solicitó siete meses.
Los hechos que la sentencia da por probados por conformidad de las partes se remontan al año 2021. Una investigación de la Unidad Central de Ciberdelincuencia de la Policía Nacional, en el marco de la lucha contra la explotación sexual de menores, descubrió que desde una IP ubicada en un domicilio de la Burgos se estaban realizando descargas completas de archivos de contenido de pornografía infantil. Después de practicar las gestiones oportunas, los agentes descubrieron que en dicho domicilio residía la ahora condenada, una mujer de 35 años natural de Palencia y que carecía de antecedentes penales.
El Juzgado de Instrucción número 1 de Madrid ordenó el 22 de noviembre de 2022 la entrada y registro en el domicilio para analizar sus dispositivos electrónicos. A través de varias cuentas de correo electrónico, había almacenado cientos de archivos con contenido pedófilo. En concreto, en una carpeta que figuraba bajo la inscripción Super CP (que en inglés quiere decir pornografía infantil), encontraron 1.045 imágenes y vídeos con nombres como «adolescente» o «niña».
El Juzgado de Instrucción número 1 de Madrid ordenó el 22 de noviembre de 2022 la entrada y registro en el domicilio para analizar sus dispositivos electrónicos. A través de varias cuentas de correo electrónico, había almacenado cientos de archivos con contenido pedófilo.
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